Cobra, la filial industrial de la constructora española ACS, ha puesto en servicio la primera instalación comercial, no experimental, de una planta eólica offshore con tecnología flotante en el mundo, según informa la compañía. Se trata de un proyecto en la costa de Escocia, concretamente en Aberdeen, del que Cobra tiene el 90 por ciento y en el que tiene intención de invertir 450 millones de euros. El restante 10 por ciento del parque es propiedad de diversos socios escoceses.