S&P y Moody's dejan a la empresa a un peldaño solo del 'grado de inversión'El Corte Inglés anunció ayer una emisión de bonos en Irlanda por un importe de 600 millones, la mitad de lo previsto en un principio, gracias las últimas desinversiones inmobiliarias, que han permitido, junto a la generación de caja, una mayor amortización de deuda. Standard & Poor's (S&P), Ficht y Moody's han otorgado a la empresa una calificación un peldaño por debajo del grado de inversión. En los dos primeros casos de BB+ y en el último el equivalente, de Ba1. La agencia española Axesor ha sido la única que ha otorgado a la compañía ese grado, con una calificación de BBB-. Fuentes del mercado explican que el interés de la emisión se situará, previsiblemente, alrededor del 3 por ciento. El gigante de los grandes almacenes resalta que "los ingresos de la oferta, en caso de que ésta fuera finalmente completada, se destinarán a hacer frente a los vencimientos de los pagarés de empleados cuyo reembolso sea anterior a abril de 2019". Asimismo, el grupo cancelará también el préstamo puente firmado en enero por 1.200 millones, y cuyo importe pendiente es de 765 millones de euros. El Corte Inglés asegura que ha decidido lanzar la oferta de bonos "como consecuencia del elevado interés que está recibiendo de inversores institucionales". Fortaleza de la marca No obstante, las agencias de calificación expresan varias dudas al respecto. Standard & Poor's y Moody's reconocen la forteleza de la marca y su fuerte presencia en el mercado español, con un patrimonio inmobiliario valorado en unos 17.000 millones de euros, pero alertan también de la fuerte competencia a la que se enfrenta y su bajo grado de internacionalización. S&P señala así, por ejemplo, la "capacidad operativa y flexibilidad financiera" de El Corte Inglés, con "más de 700 millones de visitas al año" por parte de sus clientes, pero advierte también de que "es sensible a los cambios en el comportamiento de los consumidores y la creciente competencia de los operadores online, además de los grandes minoristas especializados en productos alimentarios y no alimentarios". Así, por ejemplo, la agencia destaca el creciente dominio de Amazon y Zalando en Internet o de grupos y grandes distribuidores especializados, como Inditex y Decathlon en ropa, Mercadona en alimentación, Ikea en muebles para el hogar y Media Mark en bienes electrónicos de consumo". Y del igual modo, S&P alerta de la elevada concentración del riesgo, ya que que las diez mayores tiendas representan el 40 por ciento del ebitda (resultado bruto operativo). Moody's señala igualmente el "fuerte conocimiento de la marca y un gran interés por parte de terceros para operar en las tiendas de El Corte Inglés", además de "una cartera inmobiliaria amplia y libre de cargas". Su previsión es que el grupo que preside Jesús Nuño de la Rosa mantenga un crecimiento de las ventas de entre el 1 por ciento y el 1,5 por ciento, impulsado "en particular por el segmento de negocio de moda". En el próximo año y medio, la agencia contempla que el margen de ebitda sobre ventas se sitúe entre el 7 por ciento y el 7,5 por ciento. No obstante, y al igual que hace S&P, Moody's advierte también de la "alta concentración geográfica en su mercado doméstico, la naturaleza cíclica, estacional y discrecional de su modelo de negocio, márgenes de rentabilidad más bajos que los de sus competidores calificados y una alta dependencia de las ganancias de sus diez mejores tiendas".