El Santander defendió la figura impositiva de los créditos fiscales o DTAs que acumulan las empresas -especialmente los bancos-, porque compensan pérdidas con ganancias en un ciclo. El consejero delegado del grupo, José Antonio Álvarez, cuantificó en 3.142 millones este tipo de deducciones en Sociedades que podrá hacer uso en los próximos años en los próximos años. El directivo señaló, además, que el banco suma otros 9.600 millones. En estos momentos, el Gobierno se plantea limitar la usabilidad de estas desgravación para que el tipo efectivo que pagan las empresas sean de al menos el 15 por ciento. Álvarez señaló que estas cantidades son consecuencia de las provisiones y agujeros de la crisis y que irán normalizándose. Además, señaló que otros dos bancos españoles también tienen DTAs superiores a los 10.000 millones. El banquero defendió en el Congreso la compra del Popular por un euro, ya que ésta no sólo obligó al Santander a ampliar capital en 7.000 millones, sino que evitó la pérdida para el Estado de miles de millones de euros. Según indicó, recordando las palabras del entonces ministro Luis de Guindos, el Popular contaba con entre 28.000 millones y 36.000 millones de dinero garantizado y que el fondo creado por el sector para asegurar esta cantidad no tenía recursos suficientes. Unos recursos que fueron ratificados por el informe de Deloitte, según señaló el consejero delegado del grupo cántabro. Asimismo, subrayó que para que pudiera operar el Popular tras su resolución por parte de las autoridades europeas, el Santander aportó 13.000 millones de liquidez en las siguientes semanas.