Los problemas de la filial británica de Sabadell, TSB, tras la migración de su plataforma tecnológica iniciada en abril ya ha costado al banco que preside Josep Oliu 80 millones de euros, según comunicó ayer la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta cuantía incluye la compensación a los clientes de los supuestos fraudes a través de los canales digitales que se han producido (1.300, según ha explicado el consejero delegado de TSB, Paul Pester), los costes derivados de la supresión temporal de las comisiones por descubierto y el aumento de recursos destinados como horas extraordinarias, personal adicional y consultores especializados. La Autoridad de Conducta Financiera (FCA) de Reino Unido anunció el miércoles la apertura de una investigación sobre la migración de los sistemas ante el significativo alcance de los problemas registrados. Los primeros días del cambio de plataforma tecnológica, los canales digitales, telefónicos y cajeros automáticos del banco se vieron afectados simultáneamente.