Los partidos catalanes difieren sobre las propuestas para el diálogo del 'Cercle'La publicación ayer en el Diario Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) de la lista de nuevos consellers de la Generalitat supuso el fin de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que entró en vigor el 28 de octubre de 2017. Estos más de siete meses de intervención estatal de la administración catalana se han caracterizado por una actitud de perfil bajo del Gobierno. Tras cesar al Govern responsable de la declaración de independencia, el Ejecutivo de Mariano Rajoy se limitó a sacar adelante los trámites imprescindibles para el funcionamiento ordinario de la Generalitat, dejando para el siguiente gobierno catalán las decisiones estratégicas. Sin embargo, en este tiempo también ha habido algunas decisiones polémicas del Estado en nombre de la Generalitat, como la devolución del arte sacro de Sijena -que estipulaba la Justicia tras años de litigios pero el Govern anterior posponía-; el amago de incluir una casilla en los folletos de preinscripción escolar para poder elegir el castellano como lengua vehicular; la demanda de la Generalitat contra Artur Mas por haber destinado dinero público a la consulta del 9-N, y el más reciente de vetar el nombramiento por parte de Torra de consellers presos y huidos por no ajustarse a la legalidad (ver imágenes superiores). Debate en Sitges El fin de la aplicación del 155 coincidió ayer con un debate entre las fuerzas políticas catalanas sobre las propuestas del Círculo de Economía para resolver el conflicto catalán. La dirigente de Cs en Cataluña, Inés Arrimadas, coincidió que "no hay solución fuera de la legalidad". Expuso: "A partir de ahí, podemos llegar a acuerdos en puntos como la reforma del sistema de financiación", pero no en la reforma del Estatut para elaborar una "constitución catalana". Por su lado, el diputado de JxCat Lluís Font agradeció el "tono positivo" del documento y admitió que si la propuesta del Círculo llegara del Gobierno español representaría "un cambio en las reglas del juego" en el conflicto catalán, pero defendió que deben ser los ciudadanos de Cataluña los que decidan su futuro. En cambio, el presidente del grupo parlamentario de ERC, Sergi Sabrià, lamentó que ahora "queda muy corto buscar un acuerdo de financiación, ya que lo que necesita Cataluña es un Estado". El líder del PSC, Miquel Iceta, afirmó que "para resolver el conflicto, es necesario un acuerdo entre catalanes" y que le gusta la propuesta de financiación, pero que "es demasiado ambiciosa" en el momento actual. Asimismo, se mostró abierto a la reforma estatutaria defendida por el Círculo. Igualmente, el líder de los comunes en el Parlament, Xavier Domènech, afirmó que "es un acierto proponer soluciones" y que éstas tienen "más oportunidades" ahora que ha habido un cambio de gobierno en España. Domènech aplaudió que la reforma estatutaria que propone el Círculo puede "agrupar a mucha gente en Cataluña". Por el contrario, el presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, consideró que los independentistas no se van a conformar con un mejor modelo de financiación o una reforma del Estatut.