El líder socialista apenas podría cambiar algunas partidas de gastos e ingresosLa aprobación definitiva de los Presupuestos Generales del Estado en el Senado, con la mayoría absoluta del PP, está prevista para el próximo 19 de junio. No obstante, la moción de censura presentada este viernes por el PSOE contra Mariano Rajoy plantea varios posibles escenarios, y todos ellos con un mismo final: el PSOE se vería obligado a gobernar con los presupuestos del PP, ya fuera con los de 2018 o con los prorrogados de 2017. Si la presidenta del Congreso, Ana Pastor, fija la fecha de la moción de censura tras el pleno del 19 de junio, en el que el Senado aprobará los Presupuestos, desde ese mismo momento quedarán blindados de cara a su entrada en vigor. Si Sánchez no gana la moción de censura, la situación se desarrollaría tal y como está prevista, de forma que el PP seguiría gobernando con las cuentas que se aprobarán en el Senado. Pero si Sánchez ganase la moción de censura, se plantean varios escenarios en función de cuándo fuera nombrado presidente del Gobierno. Si el líder del PSOE gana la moción antes de la aprobación presupuestaria en el Senado, tendría que lidiar con la mayoría absoluta del PP en la Cámara Baja, que ratificaría igualmente los Presupuestos. Sánchez solo podría evitar este escenario disolviendo las Cortes, por lo que, a falta de unos Presupuestos de 2018, su recién formado Gobierno en funciones tendría que gestionar los meses siguientes una prórroga de 2017, del PP. Si finalmente el secretario general del PSOE ganase la moción de censura después de la aprobación de los Presupuestos, el líder socialista se vería obligado a gobernar con unas cuentas del PP. Incluso si convocara elecciones, los Presupuestos aprobados seguirían vigentes hasta que se aprobara una nueva ley para este año, algo imposible dados los plazos: en el mejor de los casos, pasarían dos meses desde la convocatoria electoral y la conformación de unas nuevas Cámaras. Los tiempos que implica la redacción, debate en comisiones, formación de alianzas, debate de enmiendas y aprobación en Pleno en Congreso y Senado harían casi imposible esta hipótesis. Así, en cualquier caso se daría la paradoja de que un Gobierno del PSOE tendría que gestionar unos presupuestos del PP. Pese a todo, el hipotético Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez tendría la potestad de hacer ciertas modificaciones. El artículo 134 de la Constitución Española, en sus apartados 4 y 5, señala que el Gobierno puede presentar aumentos del gasto público o disminución de los ingresos.