El secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, indicó ayer, durante un acto de El Confidencial, que los socios de la UE han acordado, en la reciente reunión informal de Bulgaria, que cada cual fomente el autoconsumo "de forma expresa, no general", es decir, que cada uno aplique los mecanismos que considere adecuados en función de cómo establezca sus tarifas eléctricas, para evitar "subsidios ocultos". Navia explicó que la disparidad de las reglas de los 28 es tal que no resulta viable establecer un sistema general -como propone la Comisión Europea- sin que haya grandes desigualdades. Como ejemplo, apuntó que en España, sin el famoso peaje sobre la autogeneración conocido como impuesto al sol, cada autoconsumidor cargaría sobre los consumidores normales 76 euros por MWh. Y que si se aplicase esa misma regla en otros países, la cifra sería mucho menor, en algunos casos de solo 2 euros por MWh. "Todos estamos de acuerdo en que hay que promover el autoconsumo", anunció, para especificar después que esa promoción se hará país a país: "Eso lo defendemos todos", apostilló. Contra un 35% de renovables Navia comentó el reciente informe de la Comisión que indica que pasar de un objetivo del 27 por ciento de renovables a otro del 30 por ciento en 2030 no tendrá impacto económico, pero recordó que a partir de ese nivel "los costes se incrementan exponencialmente" y valoró que España no está preparada para ello.