Nam congue scelerisque ante, sit amet dictum massa posuere id. Suspendisse vel enim est. Sed nec nisi ut velit cursus pellentesque a vitaeque nunc elit, commodo vitae convallis eget, posuere at Proin gravida nisi et tortor adipiscing tristique. Curabitur dignissim ultricies neque vitae tincidunt. El euro cogió fuerza en la recta final de la semana tras cuatro jornadas consecutivas en positivo aguando la fiesta a las bolsas europeas, que a medida que se acerca el mes de diciembre ven cómo se congelan las esperanzas de un rally navideño. La moneda comunitaria superó la resistencia del 1,1885 dólares y se revalorizó un 1,24 por ciento frente al billete verde en la semana. El par se sitúa así en máximos de doce semanas tras sobreponerse a obstáculos políticos como la incertidumbre por Cataluña y el resultado de las elecciones alemanas. El viernes rompió la barrera de los 1,19 dólares por primera vez desde el pasado 25 de septiembre, justo después de los comicios germanos, y coincidiendo con la publicación del dato de confianza empresarial en Alemania, que batió las previsiones y despejó cualquier atisbo de que la situación política esté afectando a la economía. La ruptura de esta resistencia allana el camino para la reanudación de la tendencia alcista principal, que podría llevar al eurodólar a 1,22 billetes verdes y que se dé por concluida la corrección de los últimos meses. "A corto plazo estamos viendo cómo la ruptura de resistencias del eurodólar se está produciendo en un momento de mercado semifestivo de Estados Unidos, pero el índice análogo del eurodólar, el índice dólar, se mantiene pegado a su soporte -los 92,59- que aún no se han perdido", explica Joan Cabrero, jefe de estrategia de Ecotrader. "El euro ha abierto la puerta a subidas del 1,22, pero hay que estar muy pendiente de la confirmacíon absoluta de si el índice dólar pierde su soporte", recuerda el experto. Un euro fuerte siempre es una mala noticia para las expectativas de beneficios de las compañías europeas, ya que actúa como una lastre sobre las bolsas del Viejo Continente (ver página xx). El EuroStoxx terminó la semana con una subida del 1,23 por ciento en los xxx puntos, a un xx por ciento de su soporte clave en los 3.520 enteros, zona que no debe perder para seguir aspirando a un rally de fin de año que se antoja descafeinado. La bolsa más alcista fue la italiana, que repuntó un 2,15 por ciento, seguido del selectivo francés, que se anotó un 1,74 por ciento. Los más rezagados fueron el Dax alemán y el Footsie 100 que sólo avanzaron un 0,39 y un 0,37 por ciento, respectivamente. El Ibex no puede con el 10.100 Ni el impulso de la banca fue capaz de desatascar el viernes al Ibex 35, que cerró la semana con un repunte del 0,40 por ciento en los 10.055 enteros. El selectivo nacional acumula en el mes pérdidas de casi un 4,5 por ciento tras retroceder desde los 10.500, y sólo si logra batir los 10.175 puntos ganará fuerza un contexto de rebote más relevante. La zona de los 9.800 enteros continúa consolidándose como el suelo de la crisis catalana, del que el Ibex se queda a un xx por ciento. Sin embargo, el optimismo puede cuestionarse ante el calendario que la bolsa española tiene por delante: a falta de 23 sesiones para que termine el ejercicio, la primera semana de diciembre arranca con un puente que coincide con la campaña electoral para las elecciones del 21-D. Una cita con las urnas que el mercado asume como la fecha donde se empezarán a despejar algunas incertidumbres. Por valores, Mediaset fue la compañía más alcista del selectivo español, con una subida semanal del 4,62 por ciento, seguida de ArcelorMittal, que avanzó un 4,5 por ciento y Viscofan, que se anotó un 3,7 por ciento. En el lado de los bajistas la más penalizada fueron Siemens Gamesa, que retrocedió casi un 11 por ciento en las últimas cinco sesiones y ya acumula una caída anual del xx por ciento.