Adquirirá entre el 15 y el 20% de la petrolera, tendrá dos consejeros y creará un núcleo estableHa ganado la guerra de opas sobre Europistas, tras disparar su anterior oferta un 49%madrid. Día grande para Luis del Rivero. El presidente de Sacyr Vallehermoso dio ayer un triple salto mortal: compró el 9,24% de Repsol YPF, ganó la guerra de opas sobre Europistas y sentó las bases para crear la quinta compañía del mundo de autopistas. Todo, en menos de 24 horas.Pero tanta gloria exigirá a la constructora el desembolso de 3.471,37 millones de euros (2.855,6 millones por Repsol y 615,77 millones por Europistas). Una escalofriante cifra que, sin embargo, el empresario confía en recuperar rápidamente. En Repsol, vía dividendo y consolidación de resultados. En Europistas, fusionándola con Itinere, filial de autopistas de Sacyr, sacándola a bolsa y cobrando los peajes. "No hacemos ninguna inversión que no se pague a sí misma", dijo un eufórico Del Rivero.Además, con estos dos movimiento habrá cerrado el círculo que ha construido en los últimos años: diversificarse hacia sectores de alta rentabilidad y convertirse en un referente de las autopistas.Repsol, suma y sigue Como en tantas otras operaciones, la entrada de Sacyr en Repsol YPF era una secreto a voces que, sin embargo, muchos se resistían a creer. La semana pasada saltó el rumor de que la petrolera buscaba un aliado entre los grandes grupos industriales. Y el nombre de Sacyr no tardó en salir a la palestra. De hecho, la operación llevaba cuajándose tres semanas, con negociaciones exclusivas entre Antonio Brufau, presidente de Repsol, Ricardo Fornesa, de La Caixa, y Del Rivero.La necesidad de crear un núcleo duro en el accionariado de la petrolera, siempre presa de todo tipo de especulaciones sobre una posible opa hostil, terminaron convenciendo a Del Rivero, que ayer ha invertido 2.855,6 millones en adquirir el 9,24% de Repsol, a un precio medio de 25,32 euros por título.Pero su objetivo es seguir adquiriendo más títulos, hasta el entorno del 15-20%, según han confirmado a elEconomista fuentes de la operación. Además, quiere participar en la gestión de la petrolera, con los dos sillones que se ha reservado en el Consejo de Administración. Lo que no entra en los planes de Del Rivero es una fusión: su presencia será financiera y estable.Con estos acuerdos, Sacyr se garantiza inyectarse en sus resultados la participación de Repsol. Si pudiera contabilizar este ejercicio completo, el 9,24% que ya ha adquirido le generaría unos 317 millones de beneficio. De hecho, aunque sólo pueda consolidar tres meses, la constructora prevé que su beneficio por acción ascienda a 1,79 euros, frente a los 1,60 que habría obtenido sin la petrolera. Para 2007, prevé que el beneficio por acción se dispare a 2,63 euros, un 60% más.Este tipo de cálculos han animado a Sacyr a lanzarse con tranquilidad sobre Repsol. La constructora financiará con inversión directa los 1.504,7 millones que ha utilizado para adquirir el primer 5%, gracias a un crédito puente que liderará Santander. De esta cantidad, el 15% es en efectivo y el otro 85% utiliza como garantía las propias acciones que compra de Repsol. El otro 4,23% que ha adquirido de la petrolera cuenta con las coberturas financieras necesarias para hacerle frente. Pero la constructora prefiere dejar una puerta abierta para seguir comprando.Con estos dos movimientos, la deuda neta de Sacyr se ha disparado hasta 14.013 millones de euros, frente a los números rojos de 11.157 millones de euros que tenía antes. Del mismo modo, sus activos se han lanzado desde 17.141 millones de euros hasta 19.997 millones.Autopistas hacia adelanteLa entrada de Sacyr en Repsol no ha impedido que cumpla uno de sus planes más ambiciosos: convertirse en un gigante de las autopistas. Ayer lo consiguió, asegurándose el control de Europistas tras elevar su primera oferta un 49%.La compañía ganó la puja con una opa de 9,13 euros por acción. Esta cifra valora todo el capital de la concesionaria en 1.231,53 millones. Pero Sacyr sólo adquirirá el 50%, lo que supondrá, como máximo, un desembolso de 615,77 millones. Una inversión que tiene garantizada, ya que la entidad francesa Calyon le ha concedido un crédito de hasta 750 millones. Las cajas vascas (BBK, Kutxa y Vital), que controlan el 32%, harán frente al resto de la opa. Con esta compra asegurada, Sacyr cuenta los meses para fusionar Europistas con su filial Itinere y crear el quinto grupo del mundo de autopistas. En el primer semestre de 2007 se llevará a cabo la fusión, que podrá crear un gigante valorado en 5.431 millones: los 4.200 millones de Itinere y los 1.231 milones que vale Europistas tras las opas.Además, Sacyr quiere seguir adelante en Eiffage, donde controla el 30%. Su objetivo último es entrar en el consejo de la gala para intentar acordar una fusión. Hasta entonces, intenta negociar proyectos comunes, especialmente, en el terrenos de las autopistas. Unas negociaciones donde Sacyr ganará enteros cuando termine de crear la nueva Itinere.