Han presentado como 'ayudas de estado' un acuerdo entre PNV y PP de peajes eléctricosSobresalto e indignación se desató ayer en la clase política y económica vasca al descubrir que las autoridades catalanas han denunciado ante la Unión Europea el acuerdo entre PNV y PP para cambiar el sistema de peajes eléctricos de las líneas de alta tensión 6.1.b, para englobar las tensiones de 30 a 36 kilovoltios en la tarifa 6.2 en el año 2018. En la práctica, esto implica una reducción del peaje eléctrico, acercándolo al que se aplica a tensiones superiores. A pesar de que desde Euskadi también se pedía que este acuerdo se extendiera a las redes eléctricas de 25 kv, el Gobierno no lo amplió. Se da la circunstancia de que las líneas eléctricas de 25 Kv son las que predominan en Cataluña, por lo que la Administración catalana considera se están amparando ayudas económicas para las empresas vascas, por lo que lo ha denunciado ante Bruselas como "ayudas de estado". El Gobierno vasco, el propio PNV y la patronal vasca Confebask mostraron ayer su indignación por esta denuncia catalana, rechazando que se trate de ayudas, sino del fin de una discriminación tarifaria y advirtiendo del coste económico que puede tener para la industria. El pacto se ratificó en 2017, pero debiera entrar en vigor en 2018 y con la denuncia ante la UE se genera gran incertidumbre. En un escueto tuit, el PNV denuncia la "grave incoherencia catalana" y señala que "no es justo ni necesario atacar los derechos legítimos de otros para defender los propios". La patronal vasca y el Ejecutivo autónomo advierten de la inseguridad jurídica que se puede generar y recuerdan que el cambio de tarifa se aplica también en Navarra, Cantabria, Asturias y Andalucía.