El Gobierno galo busca cumplir con el objetivo de bajar hasta el 50% el peso de las centrales atómicas en el mixEl ministro francés de Medio Ambiente -de Transición Ecológica lo llaman en Francia-, Nicolas Hulot, anunció ayer que su país cerrará "hasta 17" reactores nucleares antes de 2025, para cumplir con el objetivo de bajar hasta el 50 por ciento el componente atómico en la generación de electricidad. "Todo el mundo puede entender que para alcanzar ese objetivo se va a cerrar un número de reactores (...) quizá hasta 17, tenemos que mirarlo", dijo el ministro en una entrevista a la emisora de radio RTL. Hulot reiteró que para alcanzar el objetivo marcado en la ley de transición energética, "a medida que bajamos nuestro consumo y diversificamos nuestra producción, vamos a cerrar un cierto número de reactores". Pese a ello, recordó la "situación económica, social e incluso de seguridad muy diferente" de cada central, que habrá que tener en cuenta a la hora de planificar los cierres. El pasado jueves el responsable francés de Ecología presentó un ambicioso plan climático para este quinquenio, que incluye la prohibición de vender automóviles movidos por gasolina o diesel a partir de 2040. En el caso del carbón, Francia dejará de producir electricidad con ese combustible fósil "de aquí a 2022", lo que significa el cierre de centrales que ahora aportan un 5 por ciento del total. En el terreno de las energías renovables, el titular de la Transición Energética se marcó el objetivo de subir su peso relativo al 32 por ciento en 2030. Por otra parte, la compañía estatal francesa Electricité de France (ED) anunció ayer que dos empresas se unirán a ella para la compra de las acciones del negocio de reactores nucleares de la también gala Areva. Mitsubishi Heavy Industries comprará entre un 15 por ciento y un 19,5 por ciento de la división, llamada New NP, dijo ayer EDF, aunque el consejo de Mitsubishi todavía tiene que aprobar el acuerdo, según informó Efe Dow Jones. Por su parte, la francesa Assystem se hará con un 5 por ciento de New NP como parte del acuerdo. La adquisición se enmarca dentro del plan de 8.000 millones para rescatar a Areva después de que la empresa haya encadenado varios años de pérdidas, y que incluye una inyección en efectivo por parte del Gobierno francés, así como la venta de este activo.