Paga 180 millones por la gestora y planea rescatar el proyecto Sunrise del PopularBanco Santander va a controlar la totalidad de la gestora inmobiliaria del recientemente adquirido Banco Popular. El banco dirigido por Ana Botín, a través de la entidad absorbida, ha acordado la recompra del 51 por ciento de Aliseda por 180 millones de euros. Desde 2013 este porcentaje pertenecía a los fondos Värde Partners y Kennedy Wilson. La recompra supondrá un consumo de capital para el Popular de 302 millones. De esta forma se busca dar cumplimiento al objetivo de la presidenta Ana Botín de reducir a la mitad el volumen de inmuebles del Popular en 18 meses e, incluso, acelerar más estas desinversiones gracias al aumento de las provisiones, que se ha realizado gracias a la capitalización del rescate interno. Actualmente, Popular tiene cerca de 37.000 millones en activos improductivos, la mayor parte adjudicados y préstamos al promotor. Adicionalmente y para poder llevar a cabo sus aspiraciones, el Santander ha dado comienzo al proceso de búsqueda de socios para la inmensa mayoría de inmuebles y créditos relacionados con el ladrillo. Esta cartera asciende a 30.000 millones y está compuesta por la práctica totalidad de los suelos y viviendas adjudicadas por impagos y la financiación a inmobiliarias que está fallida o morosa. En principio, la idea es ir colocando a fondos de inversión toda esta cantidad de activos tóxicos. El expresidente Ángel Ron diseñó un vehículo, denominado Sunrise, para deshacerse de unos 6.000 millones de inmuebles, vehículo que no contó con la aprobación de los reguladores y que fue paralizado por su sucesor, Emilio Saracho, porque suponía riesgos de ejecución. Esta sociedad cotizaría en bolsa, pero iba a estar ligada al Popular a través de bonos para su financiación. Para la gestión de los activos que iban a ser traspasados a Sunrise la entidad tenía prevista la recompra del 51 por ciento de Aliseda. El Santander se plantea ahora rescatar este proyecto. A finales de 2013, Popular alcanzó un acuerdo para crear una sociedad conjunta que gestionase el negocio inmobiliario de Popular. La operación, valorada en cerca de 815 millones, supuso para el banco unas plusvalías de unos 710 millones de euros. La recompra se espera que se cierre en el tercer trimestre de este año. Aliseda vendió 11.290 inmuebles en 2015, con una facturación superior a los 1.970 millones. En 2014, las ventas ascendieron a 8.600 inmuebles y un total de 1.500 millones. Los activos improductivos del Santander, por su parte, están gestionados por Altamira, que está controlada en un 85 por ciento por el fondo Apollo.