La operación se cierra en 701 millones y no eleva el endeudamiento de la vascaEl grupo británico Zegona ha cerrado la venta de Telecable a Euskatel por 701,1 millones de euros, pago que se realizará en metálico y en acciones, aunque en el abono habrá que descontar 245,5 millones de deuda neta que concentra Telecable. De esta forma, Zegona se colocará como segundo accionista de Euskaltel, con un 15 por ciento del capital. Tras el anuncio en bolsa, el presidente de Euskaltel, Alberto García Erauzkin, explicó que de esta forma se cierra el proceso de integración de los tres cableros del norte de España (Euskaltel, R Cable y Telecable) y se consolida un grupo líder con sede en Euskadi, con tres marcas comerciales, más de seis millones de clientes, un volumen de negocio de 711 millones de euros y una plantilla de 678 personas. Además, destacó que entra como accionista, con un miembro en el consejo de administración, un grupo con experiencia en el sector y con visión internacional. Con la culminación del proceso, el presidente de Zegona, Eamonn O'Hare, se apunta un gran tanto ante sus accionistas, ya que en 2015 compró la firma asturiana por 640 millones de euros y ahora la vende por 701,1 millones de euros, con una revalorización de casi un 10 por ciento. Sin embargo la rentabilidad para la firma británica será mucho mayor, cercana al 35 por ciento, gracias al Brexit, debido a la caída del valor de la libra. Así los 701,1 millones de euros firmados ahora, cambiados a la moneda británica al precio actual, equivalen a unos 614 millones de libras. El pago de la operación se hará en metálico y en acciones. Así Eus- kaltel desembolsará 180 millones de euros y realizará una ampliación de capital por valor de 254,6 millones de euros, equivalentes al 15 por ciento del capital. El precio pactado para el canje de acciones es 9,5 euros, el mismo que el fijado para la salida a bolsa de Euskaltel en 2015. Esto supone que el precio final que abonará Euskaltel será 440,6 millones (descontada la deuda de Telecable y otros 15 millones de activos fiscales del grupo asturiano). Las condiciones pactadas en la operación permiten a Euskaltel mantener bajo control su endeudamiento, que se situará en 4,5 veces ebidta (resultado de explotación), con el objetivo de reducirlo a 4 veces en 2018. Estos niveles de endeudamiento permiten al operador de telecomunicaciones mantener su compromiso de dividendos a los accionistas. Arraigo y control vasco La nueva Euskatel tendrá unos activos de unos 1.700 millones. Kutxabank seguirá como primer accionista, con un 21,32 por ciento, seguido por Zegona con un 15 por ciento, Alba con un 9,35 por ciento y Abanca con un 4,48 por ciento. Con este reparto, Kutxabank pierde el control sobre decisiones estratégicas de la compañía, aunque se mantiene en estatutos la exigencia de una mayoría cualificada del 75 por ciento para las decisiones de sede social, marca y centro de trabajo. García Erauz- kin explicó que los actuales accionistas y Zegona no tiene intención de hacer cambios en esas cuestiones.