La planta de regasificación de Cartagena se ha convertido en la primera gasinera para buques en Europa. Repsol y Enagas han llevado a cabo el primer suministro de gas natural licuado como combustible directamente desde una planta de regasificación a un buque. La coordinación entre ambas ha permitido realizar con éxito la operación, que se ha prolongado durante unas cinco horas. Repsol, como suministrador del bunker de GNL, y Enagás, como gestor de la infraestructura, han puesto los medios técnicos y humanos para acometer la operación en la planta de regasificación de Enagás en Cartagena. Este tipo de suministro, pionero en Europa, es conocido como bunkering pipe-to-ship y se ha llevado a cabo mediante unas mangueras criogénicas flexibles que conectan directamente el barco con la terminal. El buque Damia Desgagnés recibió 370 m3 de GNL. Esta cantidad supone la mayor operación que se ha realizado de bunker hasta la fecha en España y para Repsol, que en operaciones anteriores había suministrado hasta 320 m3 mediante camiones cisterna. El barco Damia Desgagnés, de bandera canadiense y construido en Turquía, cuenta con 135 metros de eslora, 23 metros de manga y doble casco. Su característica más notable es que puede navegar con los tres tipos de combustibles posibles: fuelóleo, gasóleo marino o gas natural licuado (GNL). Además, es el primer asfaltero propulsado por GNL. La utilización del GNL como combustible contribuye a la mejora de la calidad del aire y es uno de los proyectos que impulsa la Comisión Europea para reducir las emisiones en el transporte marítimo.