La compañía Indra considera que el Banco Popular incumplió el año pasado las condiciones pactadas para la gestión integral de la operativa hipotecaria del grupo financiero, motivo por el que ahora justifica la resolución de dicho acuerdo. Según explican fuentes de la compañía tecnológica, el volumen real negocio del Banco Popular que originalmente Indra iba a adquirir era "mucho menor" que el estimado por el Banco Popular en la primera valoración que se realizó. Asimismo, la compañía que preside Fernando Abril-Martorell recalca que "Indra no ha realizado ningún pago al Banco Popular", al contrario de lo que explicó el grupo financiero en su informe anual de cuentas correspondiente a 2016. En dicho documento, el banco indica que "el precio de la operación ascendió a 69,5 millones de euros", lo que a su vez "generó una plusvalía para el grupo de 67,7 millones de euros". De la misma forma, Indra precisa que "no se han producido transmisiones de activos ni de negocio", entre el grupo bancario y la compañía de Tecnologías de la Información. Dicha afirmación contrasta con uno de los párrafos del informe de Banco Popular, en el que se explica que el grupo "ha traspasado a Indra un conjunto de insumos, procesos, actividades, productos y servicios que generan en sí mismos ingresos ordinarios y beneficios para Indra, habiéndose, por tanto, perdido el control y transferido los riesgos y beneficios del negocio". En el mismo documento, el banco añade que, "ante la pérdida de control sobre el negocio, el grupo Popular interrumpe la consolidación del negocio, dando de baja de su alcance consolidado los activos y pasivos que se han vendido y reconociendo por su valor razonable la contraprestación recibida". Por su parte, Indra reitera que "no se han realizado pagos al Popular, ni se han producido transmisiones de activos ni de negocio" entre ambos. El origen de la controversia se remonta al 12 de agosto de 2016, cuando Indra alcanzó un acuerdo en exclusiva con el Grupo Banco Popular para la gestión integral de su operativa hipotecaria por un periodo de diez años. La entrada en vigor de dicho acuerdo se fijó para el 31 de octubre de 2016, si bien la ejecución post-firma no se llevó a cabo por diferentes incumplimientos en las condiciones por parte del Popular, según Indra, lo que llevó a la tecnológica a resolver el referido contrato el 30 de diciembre de 2106.