madrid. Gazprom se ha lanzado a la conquista de Europa tras descubrir el verdadero oro de Moscú debajo de sus pies: los hidrocarburos.La Federación Rusa quiere jugar el papel que le corresponde en el tablero mundial energético y para ello cuenta con su super campeón nacional. El presidente de Gazprom, Alexey Miller, cree -y así lo asegura- que su compañía aprovecha lo mejor de ser una empresa participada por el estado y un gigante trasnacional de la energía. Gazprom se hizo desgraciadamente conocida el invierno pasado por los cortes de gas que provocó en Italia y Alemania debido a su enfrentamiento con Ucrania. La empresa rusa quería cobrar más por el gas y este país, aprovechando su ubicación -necesaria para llegar a los principales mercados- pretendía controlar su factura energética.El gigante ruso lleva años intentado entrar con fuerza en todo el mercado europeo. Intentó la compra de Céntrica, una de las mayores eléctricas europeas, lo que provocó una dura crisis en Gran Bretaña, tras conocerse los planes proteccionistas de Tony Blair. El presidente de Gazprom amenazó entonces con cortar el suministro a Europa, pero el Kremlin le forzó rápidamente a corregir sus palabras y asegurar que se había tratado de un malentendido de la prensa.Gazprom llega ahora a España de la mano de Repsol YPF. Ambas compañías firmaron el pasado mes de febrero un acuerdo para explorar una cooperación conjunta en proyectos de gas natural licuado, en la que la compañía española es líder mundial. Pero la energética rusa no tiene suficiente. Quiere también convertirse en proveedor de gas en España. Por ese motivo, Miller ha mantenido ya un encuentro con el consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, para analizar posibles colaboraciones.Gazprom también ha sellado un pacto con Enel y tiene como accionista a la alemana E.ON, con un 6,5 por ciento de su capital. Con todas estas bazas, la política del miedo al desabastecimiento parece haber funcionado.La compañía produce al año 547,9 billones de metros cúbicos de gas, lo que supone que con la producción de un año, España dispondría de gas para un total de 22 años como el 2005 o 15 años para Alemania. Gazprom reconoce que tiene capacidad para 600 bcm anuales y asegura que es una de las pocas empresas que puede aumentar su producción de hidrocarburos sin reducir su nivel de reservas. De hecho, lo ha demostrado durante el año pasado en el que incrementó sus reservas en 36 bcm, es decir, casi el consumo de dos años de España.Gazprom tiene unas reservas totales de 2.900 bcm, lo que supone 120 años de consumo de gas de España y 1.360 toneladas de gas condensado, pero BP considera que el país tiene reservas de gas por 4.780 bcm.El principal problema que tiene la empresa es convertir en ingresos toda ese volumen de gas. Para ello, han focalizado su estrategia en llegar a los mercados. En octubre de 2005, Gazprom dio otro paso de gigante en el sector petrolero gracias a la compra de Sibneft, lo que incrementó notablemente sus reservas de crudo. Según los datos del BP Statistical Review, la Federación rusa tiene unas reservas de petróleo similares a las de Venezuela, el mayor productor de Iberomérica.