La metodología BIM, la monitorización de obras y los sistemas inteligentes en concesiones reducen los costes de los proyectosCONSTRUCCIÓN E INFRAESTRUCTURASDe un tiempo a esta parte, las mayores constructoras e ingenierías del mundo están implantando la metodología BIM (Building Information Modeling) en todos los procesos y fases de un proyecto. El modelaje en múltiples dimensiones (más de 3D) es el paradigma sobre el que se vertebra la digitalización del sector constructor. Su uso permite una mayor precisión en el diseño de los proyectos, lo que evita modificados y sobrecostes, al tiempo que acorta los plazos. En definitiva, reduce los costes. El BIM es obligatorio en proyectos públicos de mercados como Estados Unidos, Reino Unido, Australia, México o los países escandinavos. Una de las grandes firmas que está aplicando esta tecnología en el ámbito internacional sobre múltiples tipologías de edificios e infraestructuras es OHL. Destacan la autopista Urbana Américo Vespucio y el Hospital Gustavo Fricke, en Chile, la estación SKI del Follo Line, en Noruega, y la estación demetro de la calle 72 de Manhattan, en Estados Unidos. Con ello, según el caso, ha podido detectar conflictos de diseño y evaluar alternativas al mismo, realizar análisis de la estructura existente y de cómo el proyecto constructivo lo mejora y complementa, interactuar con los diferentes agentes involuctrados en la obra o modelar y simular detalles singulares, como aisladores sísmicos. El gran control que permite BIM sobre la obra consigue evitar errores e innecesarios gastos extra. Así lo lleva constatando Sacyr desde el año 2001, cuando decidió implantar BIM en el proyecto de la Casa de Música de Oporto (Portugal). Esta experiencia sirvió entonces para implantarlo paulatinamente y formar un núcleo estructurado de trabajo BIM que se dedica a sistematizar e integrar la metodología de la empresa y a crear posteriormente un departamento BIM que se encarga de estas necesidades. De igual modo, OHL ha desarrollado en los últimos años herramientas topográficas avanzadas para la implantación de un marco de referencia de precisión en obra, que le permite trabajar con un modelo digital del terreno de gran detalle, fácilmente actualizable y accesible desde una tableta funcional o un ordenador a distancia a través de Internet. La monitorización de las obras, el desempeño de tecnologías digitales para la planificación y el control de su maquinaria en la obra, con visualización 3D y en tiempo real (fundamentalmente en el ámbito marítimo) y la simulación en proyectos urbanos que es capaz de predecir el impacto de determinadas infraestructuras (en el tránsito de vehículos o peatones) son otros instrumentos que desarrolla OHL. Medidas que se encuadran en la estrategia de digitalización e innovación que ha emprendido el sector de las infraestructuras. Una transformación que afecta a toda la cadena y para la que las grandes cuentan con desarrollos internos y con colaboraciones desde el exterior. Es el caso de Sacyr, que cada año organiza unos premios para startups que sirven de incubadora de ideas. No en vano, en algunos casos, la constructora incluso entra en su capital para crecer de la mano, como ocurre con la tecnológica EPC Tracker, ganadora del premio en 2015. Las nuevas tecnologías, la innovación y la digitalización también tienen una importancia capital en la progresión de los modelos de concesiones. Más allá de su importancia en los procesos de licitación, su aplicación se constata igualmente en el día a día de la infraestructura. OHL, por ejemplo, ha desarrollado sistemas inteligentes para cubrir la cadena de valor de las operaciones, englobando desde la gestión dinámica de los peajes hasta la caracterización en tiempo real del tráfico, lo que permite prevenir congestiones e incluso proyectar el reemplazo y mantenimiento del pavimento. En este ámbito, destacan también los sistemas propios de georreferenciación con imágenes 360º, que posibilitan optimizar las tareas de mantenimiento de las autopistas o los ferrocarriles. Dentro de las ideas innovadoras, Sacyr está impulsando el desarrollo de aplicaciones móviles para los pagos en las concesiones. Abertis, por su parte, apuesta claramente por mejorar las prestaciones de sus autopistas. En octubre pasado, por ejemplo, finalizó con éxito la prueba piloto de los carriles VIA-T sin barrera en La Roca e inició las obras de su implantación definitiva. Esta iniciativa permitió eliminar las barreras de los carriles de telepeaje para turismos en La Roca (Cataluña), de forma que los vehículos podían pasar por el peaje sin parar a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora.