Realia, controlada por el magnate mexicano Carlos Slim, anunció que su beneficio atribuible más que se sextuplicó, hasta los 116 millones, gracias principalmente a las quitas de su deuda. La inmobiliaria contabilizó 113,6 millones en quitas asociadas a la refinanciación de la deuda residencial (72 millones) y del préstamo adquirido por Inversora Carso, de Slim, a la Sareb (41 millones). En un comunicado al regulador, el grupo dijo que sin extraordinarios sus cuentas habrían arrojado un beneficio neto atribuible de 41 millones. Los ingresos subieron un 2,4 por ciento, a 97 millones de euros, con una caída del 5 por ciento de los ingresos por rentas, mientras que el ebitda subió un 3 por ciento a 42 millones de euros. Tras la ampliación de capital, el grupo dijo que Inversora Carso mantiene un 33,844 por ciento de Realia, mientras que FCC, también participada mayoritariamente por Carso, tiene otro 36,925 por ciento. Realia informó que ha reducido su deuda financiera neta a 750 millones, desde los 1.070 millones al cierre del año.