La inmobiliaria Realia explica en un documento presentado a la CNMV que podría entrar en concurso de acreedores si no acuerda con sus prestamistas la refinanciación de un crédito sindicado por 687 millones de euros que vence el próximo mes de abril. El grupo lleva semanas buscando refinanciar esta deuda, correspondiente a su filial de patrimonio, tras haber reestructurado los préstamos de su actividad de promoción en 2016 gracias a la financiación del grupo Caixa y del principal accionista de Realia, el empresario mexicano Carlos Slim. El préstamo de patrimonio vence el próximo mes de abril y si no lo refinancia, el grupo consolidaría el fondo de maniobra negativo de 182,5 millones de euros que tiene en la actualidad. "Si a dicha fecha no se ha llegado a un acuerdo de una nueva estructura financiera con acreedores financieros (actuales o nuevos), o no ha sido posible la incorporación de nuevas fuentes de financiación, la compañía en esos supuestos tendría un problema de liquidez que podría provocar una situación concursal", explica el grupo. Realia utilizó los fondos de la ampliación de capital ejecutada a finales de 2016 por 147 millones para pagar parcialmente el préstamo de La Caixa (en 80 millones de euros) y totalmente el de Slim (20,4 millones de euros). A 30 de septiembre, Realia tenía una deuda de 900 millones, repartida entre su filial de patrimonio y la de promociones y suelo. "Ante este nivel de endeudamiento, existe el riesgo de que si las condiciones del mercado o de explotación del negocio se deterioraran aún más, el negocio de Realia sea incapaz de generar suficiente efectivo como para hacer frente a los vencimientos", dijo el grupo, que mencionó que podría tener que vender activos o ampliar capital, entre otras medidas.