Negocia su cobro en Australia, EEUU, Canadá, Iraq, Colombia o EspañaACS acumula obras ejecutadas sin certificar -no cobradas- en todo el mundo por más de 1.800 millones de euros. Se trata de contratos que han generado diferencias entre el cliente y la compañía que preside Florentino Pérez bien por expedientes modificados, bien por precios contradictorios o bien por diferencias en las unidades de producción. En unos casos se hallan en negociaciones y en otros ya han pasado a una situación litigiosa por no haber alcanzado un acuerdo. El grupo ha desgranado los proyectos que tiene en este escenario a requerimiento de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). ACS contabilizaba al cierre de 2015 un total de 3.885 millones de euros de obra ejecutada pendiente de certificar. De ellos, aproximadamente 1.938,4 millones correspondían a saldos de proyectos cuya resolución se hallaba ligada a procesos de disputa, negociación o en algunos casos arbitraje. El resto se refería a diferencias que se esperaban resolver sin problemas. Según señala ACS en su respuesta a la información adicional de auditoría reclamada por el supervisor español, a lo largo de 2016 determinados proyectos que se encontraban en negociación pasaron a un escenario de resolución de arbitraje, por importe de 68 millones, al tiempo que la multinacional española alcanzó acuerdos por otras obras que suponían 111,8 millones. En total, por tanto, son 179,8 millones que se restarían de los 1.938,4 millones citados, lo que situaría el importe de obras conflictivas por debajo de 1.800 millones. Una cifra, no obstante, que podría -la lógica invita a que así fuera- haberse incrementado con otros contratos que hayan entrado en dicha situación durante el último ejercicio. El grueso de los proyectos en disputa proceden de su filial Hochtief, que acapara 1.698 millones. Por encima de todos sobresale el contrato para el diseño y contrucción de un muelle y la estructura marina en Australia, el Gorgon Jetty, con 808 millones (1.130 millones de dólares australianos). Conflicto con Chevron Contratado por la petrolera estadounidense Chevron, el consorcio participado por Cimic, filial australiana de ACS -y de Hochtief-, y Saimpem finalizó los trabajos del Gorgon Jetty en marzo de 2015. Los expedientes reclamados suman más de 2.360 millones de dólares australianos (1.719 millones de euros), de los que ACS tenía registrados en 2015 el 48 por ciento (los 808 millones de euros señalados). El conflicto se halla en un tribunal de arbitraje. Los árbitros y el presidente fueron nombrados en diciembre pasado y en las próximas semanas se celebrará la primera conferencia de procedimientos. En paralelo, Cimic ha iniciado un proceso en Estados Unidos contra Chevron. Al margen de este proyecto, ACS también tiene disputas abiertas por contratos de crudo de Cimic en Iraq. Mientras, su filial Dragados enfrenta procesos en Estados Unidos por la Estación de Metro 86th de Nueva York (25,7 millones) y el túnel de Seattle (11 millones), en Canadá, por la autopista Northeast Anthony Henday Drive (31,5 millones), en Colombia, por el Túnel de Bogotá-Concay (25,6 millones), en Polonia, por las autopistas S8 y S17 (19,5 millones) o en España, por el metro de Sevilla (25,5 millones) y el Puente de Cádiz, 30,8 millones -este último ya resuelto-. En función de la recuperabilidad, ACS había provisionado para cubrir estos riesgos 812 millones de euros en 2015.