En Granda ganan hasta un 80% por encima del sector y piden fuertes subidasEl comité de empresa de Capsa, la empresa que gestiona Central Lechera Asturiana, quiere consolidar los privilegios adquiridos en los últimos años en la firma de un nuevo convenio colectivo en la planta de Granda. Con salarios que superan entre un 65 y un 80 por ciento la media del sector, los sindicatos, que representan a 600 personas, reclaman un crecimiento del IPC anual más otra parte variable, que se consolidaría cada año. Y eso al margen de subidas por antigüedad del 5 por ciento cada cinco años; 38 días libres cada ejercicio y garantías de que los hijos de los empleados y de los socios de la cooperativa tendrán prioridad para acceder a un puesto de trabajo, algo que, de hecho, ya estaba pasando en la práctica. Tras más de un año de negociaciones del convenio, el comité ha convocado varias jornadas de huelga, obligando a la intervención de los antidisturbios para facilitar el acceso de los trabajadores a las instalaciones. Sueldos garantizados En un comunicado Capsa Foods, la empresa que gestiona la marca Central Lechera Asturiana, explica que "a la vista de los niveles salariales existentes, que superan con mucho los del sector y de las empresas de la competencia", ha propuesto no sólo garantizar los sueldos, sino además un subida que puede llegar a superar el 10 por ciento hasta 2019, pero siempre en función de los beneficios y del cumplimiento de objetivos, garantizando un fijo del 1 por ciento anual, pero de forma no consolidable. De hecho, y para facilitar la consecución de estos objetivos, la empresa ha ofrecido una inversión en este periodo de 40 millones de euros. "Por mandato del propio convenio, se establecerían grupos profesionales a los que se vincularían categorías, sin que ello suponga una merma retributiva para la plantilla actual", asegura la compañía en su comunicado. Su objetivo es que estos grupos "sirvan como base del desarrollo profesional y de la promoción de los empleados, debiendo negociar los sistemas de acceso y duración". En declaraciones a la prensa asturiana, el presidente del comité de empresa de Granda, Ramón Urbano, insiste a pesar de todo en que no están pidiendo un aumento salarial, sino "el mantenimiento del poder adquisitivo". Urbano ha respondido, además, a la dirección de la empresa sobre el hecho de que tengan el mejor convenio del sector. "No conozco todos los convenios, sé que los salarios de aquí no los ha regalado nadie y fueron a base de conquistas sociales y laborales", ha asegurando, insinuando además que el problema no está en el sueldo de los trabajadores, sino en los de alta dirección. En Granda, donde hay además 150 trabajadores en las oficinas centrales, un empleado base de la planta puede llegar a recibir una retribución con primas cercana a los 30.000 euros brutos al año, muy por encima del resto del grupo, que suma en conjunto 1.300 empleados. Los sindicatos insisten en que son logros "irrenunciables" y mantienen la línea dura con la convocatoria de huelga, que desde la empresa se tacha de medida de coacción, ante la que no negociará.