La firma se alía con Vueling para volar cada 15 minutos entre Barajas y El PratIberia toma posiciones para operar el low cost de largo radio desde El Prat. La compañía que preside Luis Gallego ha reconocido oficialmente que lleva varias semanas negociando con los pilotos y los tripulantes de vuelo (TCP o azafatas) un ajuste salarial y nuevos criterios de productividad para abanderar el nuevo negocio de bajo coste de IAG. "La compañía quiere equiparar los salarios de los pilotos a lo que se está pagando en las compañías de bajo coste. Hace números para presentar una propuesta competitiva y flexible a su matriz para quedarse con las rutas de largo radio desde Barcelona", explican fuentes cercanas al colectivo de los pilotos. En este sentido, el propio Gallego reconoció en una comida con periodistas que "las negociaciones están muy avanzadas y que buscan lograr un ajuste de costes para ofrecer un servicio competitivo y rentable que permita ofrecer tarifas bajas. La estructura de costes actual no es suficiente". "No hay nada asegurado. Todavía lo puede hacer Aer Lingus bajo otra marca o que incluso lo haga el personal de Iberia bajo otro nombre", explican otras fuentes de la compañía. Así las cosas, parece que la empresa se va a dar lo que queda de mes para continuar con las negociaciones con los sindicatos antes de presentar una oferta al consejero delegado de IAG, Willie Walsh. Y es que, según aseguran desde Iberia, el anuncio del nuevo servicio se tiene que realizar a finales de febrero o principios de marzo, para que dé tiempo a poner en venta los billetes, organizar las rutas y poder empezar a operar los vuelos de bajo coste en verano. Los sindicatos están participando activamente en estas negociaciones y parecen abiertos a equiparar más productividad a las empresas de bajo coste. En este punto, parece que los pilotos tendrán que bajarse menos los sueldos que los TCP, que también están luchando para que la nueva producción se quede dentro de Iberia y así evitar generar competencia desleal desde Barcelona, que vacíe el hub de Madrid y que quite rutas. En este punto, el sindicato Sitpla defendió en una carta que el colectivo ha hecho esfuerzos en los últimos años para "operar con unos costes competitivos frente a las low cost", que ahora están dando el paso al largo radio, y recuerda a la compañía que disponen de las herramientas necesarias para poner a volar a los tripulantes que acaban de entrar y que son más baratos que los que llevan varios años. La presión de las compañías de bajo coste ha obligado a IAG a poner en marcha un plan para proteger gran parte de su mercado: el Atlántico Norte. Norwegian y la islandesa Wow Air han abierto rutas a EEUU a precios casi imbatibles desde Reino Unido (desde 70 euros en el caso de la islandesa y no más de 130 en el caso de la pseudo noruega) y planean trasladar el modelo a España, una estrategia que llevó a la firma que dirige Walsh a anunciar que "operará vuelos de bajo coste a EEUU, Asia y Latinoamérica desde Barcelona". A partir de julio Entretanto, Iberia se ha aliado con Vueling para revolucionar el puente aéreo. La compañía que preside Gallego ha firmado un acuerdo con la firma low cost para aumentar las frecuencias diarias entre Madrid y Barcelona y llegar a volar cada 15 minutos en las horas punta (de 8-9 am y 15 a 17 horas pm). En el resto de horarios habrá al menos un vuelo cada hora e incluso cada media hora. Así, a las 16 frecuencias que vuela Iberia cada día se sumarán las 10 diarias de Vueling, que empezará a operar desde la zona reservada por la aerolínea de bandera para puente aéreo, tanto en El Prat como en Barajas. Con esta alianza, que se pondrá en marcha en julio de 2017, Iberia logra aumentar las conexiones entre ambas ciudades sin subir los costes, lo que le permite ganar competitividad ante el tren. La aerolínea seguirá teniendo el control de la venta de los billetes de puente aéreo, pero el pasajero podrá volar tanto con un avión de Vueling como de Iberia, en función del horario.