El Parlamento y el Consejo acuerdan la reducción de los precios La UE salvó ayer el último obstáculo para acabar con el roaming. El Parlamento Europeo y los Estados miembros (el Consejo) lograron un acuerdo con el que se redujeron los precios máximos que se cargan las compañías europeas al gestionar las comunicaciones de sus usuarios, lo que permitirá terminar con el sobrecoste cuando se utiliza el móvil en el extranjero. El gran cambio llegará con los datos, dado que no solo los consumidores utilizan el móvil para conectarse a Internet o usar apps, sino que también se pagan los mayores precios por estos servicios. Se reducirá desde los 50 euros por GB actuales hasta los 7,7 euros por GB. Para las llamadas, el precio máximo mayorista menguará de los 0,05 euros a 0,032 euros. La reducción seguirá durante el próximo lustro sobre todo en los datos, hasta llegar a los 2,5 euros por GB en 2022. El acuerdo de ayer representó una derrota para España, que había solicitado un mecanismo de salvaguarda para compensar a las operadoras nacionales cuando incurren en costes adicionales en circunstancias extraordinarias, por ejemplo en casos de gran afluencia de turistas. Sin embargo, una mayoría de socios y la Comisión optó por contar con un marco común de tarifas para anclar la predictibilidad de los precios. A partir del 15 de junio, las telecos tendrán que ofrecer a los residentes en un país, o que demuestre un vínculo con el lugar en el que contrate la línea, los mismos precios cuando viaje al extranjero.