Saeta Yield, la filial de renovables de la constructora ACS, ha comprado dos parques eólicos en Uruguay por 65 millones de dólares (60,5 millones de euros). En concreto, se trata de las instalaciones de Carapé I y II, que suman una capacidad total de 95 MW. Hasta el momento, estaban en manos de Corporación América y Grupo Sanjose. La compañía también participada por el fondo GIP (es dueña de un 24,01 por ciento de su capital) inicia en Latinoamérica su internacionalización con esta operación, que costeará con liquidez disponible y espera cerrar en el primer semestre del año. Es más, es reseñable que es la segunda operación de compra que cierra la filial verde de ACS desde su constitución y salida a bolsa a principios de 2015, tras la adquisición de dos plantas termosolares en España en 2016. Los nuevos activos adquiridos están en operación y venden su energía bajo un contrato de compraventa a largo plazo con la Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE), principal empresa eléctrica del país sudamericano.