La compañía Samsung Electronics elevó sus ganancias un 11,3 por ciento en el último ejercicio, por encima de las previsiones de la mayoría de analistas, al tiempo que mostró unos resultados especialmente buenos en el cuatro trimestre. Todo lo anterior evidencia una sólida recuperación tras el varapalo financiero que supuso la retirada de su teléfono Galaxy Note 7. La compañía vendió en el último trimestre del año 90 millones de teléfonos y ayer se apreció un 0,26 por ciento en la Bolsa de Seúl.