Fomento licita en diciembre la primera línea europea de transporte marítimo rápidomadrid. Todos los días pasan por las fronteras pirenaicas de Irún y La Junquera más de 9.000 camiones, una cifra preocupante que amenaza con congestionar, todavía más, las carreteras hispano-francesas. Pero este problema puede pasar a la historia en breve. El Ministerio de Fomento ha dado luz verde a la puesta en marcha del primer concurso público europeo para licitar una autopista del mar. Así se denominan las líneas rápidas de transporte marítimo de alta calidad que descargarán de tráfico la carretera. Tras un acuerdo firmado antes del verano entre las administraciones española y francesa, la cartera dirigida por Magdalena Álvarez ya ha encargado varios estudios de viabilidad previos a la licitación pública, "que se iniciará en diciembre de este año", explican desde Fomento. El despacho encargado, finalmente, de asistir jurídicamente a la redacción del pliego de condiciones será el británico Clifford Chance.Esta primera autopista del mar europea supondrá un gran desembolso económico para ambos Gobiernos (todavía está pendiente de presupuestar) y unirá un puerto de la costa cantábrica española con otro del Norte de Francia. El punto de origen y de destino depende de las propuestas que se presenten a la licitación. Las empresas interesadas deben entregar sus candidaturas a través de consorcios hispano-galos. "Lo normal es que en cada oferta participe, como mínimo, un operador portuario, una naviera y un operador de transporte", aseguran las mismas fuentes.Las navieras toman posiciones Ante un concurso de tal magnitud e importancia estratégica para el sector, las empresas navieras han comenzado los contactos con los diferentes candidatos para crear los consorcios. Empresas como Trasmediterránea y Suardíaz, por parte española, y la naviera Dreyfuss, por el lado francés, ya han mostrado su interés por la nueva autopista del mar. De hecho, todas ya participan en rutas marítimas en la zona.La filial de transporte marítimo de Acciona espera conocer los detalles del pliego de condiciones para participar en el concurso. "Nuestra intención, en un primer momento, es participar solos en la licitación desde el puerto de Bilbao", explican desde la compañía. Desde allí, la naviera ya tiene una ruta comercial con la localidad británica de Portsmouth. En la costa cantábrica española, los puertos con más posibilidades para albergar la nueva ruta son Bilbao, Santander y Gijón. Aunque tampoco se descarta la posibilidad de las infraestructuras gallegas de La Coruña y Vigo. En Francia también existen varias alternativas. En la costa Norte hay puertos como Dunkerke, Calais y Le Havre que por su situación estratégica, están en frente de la costa británica, podrían participar en el proyecto. Otra variante es el puerto de Montoir de Bretagne, cerca de Nantes, (en la imagen) que ya ha mostrado su interés por crear una autopista del mar con Bilbao. Si el calendario transcurre según lo previsto, a mediados del próximo año se conocería el ganador del concurso y la primera autopista del mar europea podría ser una realidad a comienzos de 2008.La primera vez que se habló de las autopistas del mar fue en el Libro Blanco del Transporte, elaborado por la Comisión Europea en 2001. La obsesión de Bruselas era que el servicio marítimo tuviera la misma calidad y coste que el transporte por carretera y puso como fecha límite 2010 para lograrlo. Se pretende que una línea marítima de estas características tenga capacidad para transportar más de 1.000 camiones al día y pueda ofrecer una periodicidad diaria en el servicio que no tienen en la actualidad las rutas marítimas de corta distancia. Para conseguir esta rapidez deben mejorarse las infraestructuras portuarias ya que los barcos se tienen que cargar y descargar en tiempo récord. El tipo de buques que realizan estos trayectos se denominan ro-ro y transportan camiones con la cabeza tractora incluida. Un estudio de la UE considera que estas rutas son viables económicamente en los tramos marítimos superiores a las 450 millas y con un volumen de más de 15.000 contenedores al año.El gran problema para el consorcio ganador es que, durante los primeros años, no será un proyecto rentable. Para compensar las pérdidas, la Comisión ofrece varias vías de financiación durante los primeros cinco años. Además de las ayudas de los Estados, existen fondos europeos de desarrollo destinados a las Redes Transeuropeas de Transporte, en las que se integran las propias autopistas del mar.