Argentina y México intervienen para frenar la caída de sus monedaswashington. Parece que el parón económico que sufrirá el planeta será más contenido en los países emergentes, según reconoció ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI). De hecho, han sido las economías en desarrollo las que han amortiguado el golpe occidental, por eso, no es extraño que bloques, como los países latinoamericanos, cierren el año con un crecimiento del 4,5 por ciento, por encima de la media mundial (3,9 por ciento). Pese a esta fortaleza, países como Argentina y México no son ajenos a la tormenta financiera internacional. Ayer, sus Bancos Centrales realizaron fuertes intervenciones para frenar la caída de sus monedas frente al dólar. El supervisor mexicano intervino en el mercado cambiario con una subasta de 2.500 millones de dólares (1.830 millones de euros), después de que el peso mexicano alcanzara su máxima caída histórica frente al dólar. La divisa argentina se depreció un 0,31 por ciento y el supervisor inyectó 93 millones de dólares (68 millones de euros) para contener el avance del billete verde. Con todo, Charles Collyns, economista de mercados emergentes del FMI, destacó que "los países latinoamericanos han demostrado estar preparados y ser más resistentes". Eso sí, advirtió de que Latinoamérica se enfrenta ahora a un contexto "más peligroso" que en los últimos cuatro años, cuando registró un crecimiento medio del 5,6 por ciento. En 2009 está previsto que crezca un 3,25 por ciento. Pese al aliento que ofrecen buena parte de las economías emergentes, el FMI advirtió al bloque asiático que será él quien deberá decidir sobre cómo lidiará con la caída del crecimiento mundial. Este año, el PIB en la región se moderará al 7,75 por ciento y caerá al 7 por ciento en 2009. China verá como su economía deja atrás el PIB del 11,9 por ciento de 2007 para moverse entre el 9,7 por ciento y el 9,3 por ciento entre 2008 y 2009. India crecerá este año un 7,9 por ciento y caerá un punto en 2009.