Carrefour España cerró 2015 con un beneficio neto de 254,53 millones de euros, lo que supone una mejora del 36 por ciento respecto al ejercicio anterior. Sus ventas volvieron a crecer por primera vez en cinco años, con un aumento del 0,18 por ciento, hasta 7.346 millones de euros. “La fuerte caída del precio de los carburantes ha impactado negativamente en la facturación, pese a haberse incrementado significativamente el volumen de compra de nuestros clientes”, asegura la empresa en el informe anual remitido al Registro Mercantil. El resultado de explotación de Carrefour España se situó en 64 millones de euros, más del doble que en 2014, cuando alcanzó los 26,3 millones de euros.