Deutsche Bank ha congelado la contratación de personal en medio de los temores de los inversores de que la multa pendiente con Estados Unidos pueda derrumbar las finanzas del banco alemán, informó ayer Reuters. La entidad notificó el miércoles a sus gerentes en todo el mundo que no contraten personal para ahorrar costes, con la salvedad del departamento legal. Se trata de la última iniciativa de una serie de respuestas de los directivos a la crisis de confianza desatada por la milmillonaria multa que prepara EEUU por la comercialización de activos vinculados a créditos subprime. El Departamento de Justicia estadounidense anticipó una potencial sanción de 12.500 millones de euros, que el banco negocia bajar a 5.400 millones. Es su mayor frente legal, aunque no el único. Entre otros, también se ha visto investigada por la manipulación del euribor y libor. Para reducir gastos y atender a las fuertes provisiones, el banco prescindirá de 9.000 empleados y tiene en venta varios negocios. Se esperan, sin embargo, medidas adicionales.