La compañía prepara un plan de reducción de costesLa nueva Isolux Corsán, capitaneada por Nemesio Fernández-Cuesta, se ha puesto a trabajar ya en la elaboración de un plan estratégico con horizonte 2020, que tendrá el foco puesto en la generación de caja, el aumento de la cartera y la reducción de los costes de estructura. Tras alcanzar a finales de julio un acuerdo con sus acreedores para reestructurar 2.000 millones de euros de deuda, la compañía afronta una nueva etapa que, por el momento, ya ha supuesto la remodelación de su estructura organizativa, la reducción del número de directivos, la simplificación de su organigrama, así como el refuerzo de la gestión de las unidades de negocio regionales. Gracias a la nueva hoja de ruta que está diseñando la compañía para los próximos cuatro años, Isolux espera mejorar el control de los riesgos de los proyectos, así como los márgenes. También tiene como objetivo conceder más peso a los procesos de control de gestión y aumentar la autonomía de decisión de los responsables operativos de los proyectos. Consecuencia de ello, las diez regiones que anteriormente configuraban el área de negocio de Ingeniería y Construcción (EPC) han quedado reducidas a seis (Sudamérica, Argentina, Europa y Magreb, Norteamérica, Asia Pacífico y Oriente Medio y África). Esta dirección general también cuenta con dos unidades de negocio: Energía y Transmisión y Distribución e Infraestructuras. Junto a estas medidas, Isolux Corsán ha lanzado además un programa de reducción de los costes de estructura que incluye, entre otros puntos, la implantación de una organización más eficiente y la concentración en aquellas actividades y proyectos más rentables. En este contexto, la compañía ha comunicado a los sindicatos un expediente de regulación de empleo (ERE) para 535 trabajadores, un tercio de la plantilla del grupo en España.