El fondo español aportará 12,5 millones y los Arango otros 29 millones másDiez años después de convertirse en el socio de referencia de la familia Arango, el banco de inversión Goldman Sachs ha encontrado comprador para el 30 por ciento que ostentaba en el Grupo Vips. El elegido ha sido el fondo español ProA Capital, que inyectará 12,5 millones de euros tras una ampliación de capital de 41,5 millones en la empresa -el resto será suscrito por la familia Arango con 29 millones de euros más- para reforzar los recursos financieros y poder acelerar así sus planes de crecimiento y reforma de locales. Esta operación, que está sujeta todavía a la aprobación de Competencia, lleva gestándose desde hace casi un año, aunque el proceso fue limitado por la familia Arango a determinados candidatos y sólo se podía entrar previa invitación. El 70 por ciento del capital seguirá, de hecho, en sus manos. El presidente del grupo Vips, Plácido Arango, agredeció ayer a Goldman Sachs “la estrecha colaboración y el valor que ha aportado durante estos años, en los cuales ha sido necesario reinventarse para hacer frente a la caída del consumo y la evolución del consumidor que la crisis económica trajo consigo”. Altamar, Garrigues y Uría han actuado como asesores del Grupo Vips, mientras que los de ProA han sido Fidentis, Optima Corporate, Linklaters y EY. La entrada de ProA en el capital de Grupo Vips llega en el momento de recuperación económica de la firma. Propietario, además de la conocida enseña de tiendas y restaurantes, de cadenas como Starbucks, Ginos o Fridays, el grupo Vips volvió el año pasado a beneficos por primera vez desde 2008. La compañía, que firmó en diciembre del año pasado un crédito sindicato de 70 millones para refinanciar deuda, cerró el pasado ejercicio con un resultado de 1,5 millones frente a las pérdidas de 3,2 millones registradas en 2014, lo que supone que todos los indicadores se sitúan ya en positivo. Las ventas totales del sistema, incluyendo no sólo las de los establecimientos propios, sino también de las franquicias, crecieron un 5,5 por ciento, hasta 377,6 millones. La facturación de la compañía fue de 336,3 millones. Por su parte, ProA Capital -formado por antiguos N+1-es conocido por haber participado en la puja por Pepe Phone o en la de Eat Out. Fuentes del mercado le sitúan también en el concurso para hacerse con Fruselva, compañía especializada en zumos y batidos. El pasado año cerró dos de sus operaciones estrella: la venta al fondo Carlyle del Grupo Palacios y la de Eugin al firma cotizada Abu Dhabi NMC Health. En cartera, cuenta con Ambuibérica (la sacó al mercado hace unos meses, pero se paralizó el proceso), Saba Infraestructuras, Hospital de Llevant, Ibermática, Rotor Componentes Tecnológicos, Avizos y Suanfarma.