El anuncio, que se producirá esta semana, dará un mayor peso al Banco Europeo de InversiónLas infraestructuras energéticas y las pymes estarán en el centro de este plan de inversiónLa Comisión Europea ampliará esta semana el llamado Plan Juncker desde los 315.000 millones previstos hasta los 500.000 millones de euros. Este aumento irá acompañado también de un incremento en el número de años para su ejecución. Mientras que en un primer momento el objetivo inicial llegaba hasta 2018, la intención ahora será llevarlo más allá y el plazo alcanzará el año 2020. El anuncio se espera que se produzca en el debate sobre el estado de la Unión que se celebrará el próximo miércoles y que sirve cada año como apertura del curso político en Bruselas. Con esta decisión, el presupuesto comprometido pasaría de cerca de 21.000 millones de euros a alrededor de 34.000 millones por parte de la Comisión Europea. La intención de este incremento es dotar de fondos para poder hacer frente a la caída de la inversión que está produciendo en los estados miembros al tiempo que sirva de ayuda para contribuir, por ejemplo, a cumplir con los objetivos marcados por la Cumbre de París de descarbonización de la economía. En la ampliación del llamado Plan Juncker, los proyectos de ahorro y eficiencia energética así como las interconexiones eléctricas y de gas tendrán un peso importante. De hecho, se espera que parte de las redesd incluidas en la llamada Declaración de Madrid -que contribuirán a llegar a un 10 por ciento de interconexión entre la Península Ibérica y el resto de Europa- reciban financiación de este vehículo comunitario. Asimismo, se incluirán una buena parte de los llamados proyectos de interés comunitario, cuya financiación será así mucho más sencilla. El Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas (FEIE) -que gestiona el dinero de este llamado popularmente Plan Juncker- es el elemento central de este Plan de Inversiones de la Comisión. El FEIE ofrece una garantía de primera pérdida, gracias a la cual el BEI ha podido invertir en más proyectos, a veces más arriesgados, e invertir más pronto que sin el FEIE. En conjunto, este vehículo ya opera en 26 Estados miembros y ha activado inversiones hasta julio de este año por 115.700 millones de euros con un total de 289 proyectos, según los datos que facilita el departamento del vicepresidente Katainen. Hasta el momento, las pymes se han beneficiado especialmente del FEIE y con el fin de fomentar la actividad del fondo en los Estados miembros más rezagados, el BEI y la Comisión aumentarán su divulgación a escala local. De hecho, en febrero, la Comisión publicó orientaciones sobre la forma en que los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos FEIE) pueden combinarse para permitir la mayor inversión posible. La Comisión presentará propuestas legislativas este otoño para ampliar la duración del FEIE, teniendo en cuenta la escasez de recursos presupuestarios. Jyrki Katainen, vicepresidente responsable de Fomento del Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad, valoró el pasado mes de junio el funcionamiento del primer año del fondo: «Junto con el BEI, hemos avanzado mucho en los últimos doce meses. Hemos apoyado proyectos innovadores de energía, centros sanitarios, desarrollo urbano y banda ancha de alta velocidad. Cerca de 150 000 pymes pueden acceder a una nueva financiación. Hemos creado un centro que presta servicios de asesoría y apoyo técnico a los promotores de proyectos. Hemos puesto en marcha un nuevo portal para que los promotores puedan mostrar sus proyectos a inversores de todo el mundo. Pero queda mucho por hacer: debemos seguir desarrollando el mercado único (el inigualable argumento de la UE) y los Estados miembros deben colaborar para eliminar las barreras a la inversión». En España hasta el momento han recibido dinero de este fondo empresas como Redexis, Gestamp, Balearia o Puertos del Estado, así com el ICO para lanzar un fondo que sirva de financiación para las pequeñas empresas.