Aunque parezca mentira, ni los deportivos ni las berlinas han sido capaces de darle a la marca un soplo de aire fresco como sí lo ha hecho el pequeño Q2. Un futuro ‘best seller’. Por Jorge ArenasEl Audi Q2 abre un nuevo camino en la marca, el del subsegmento B-SUV. En el merca- do hay otros rivales pertenecientes a esta categoría, pero pocos tienen un enfoque premium, así que podemos decir que el pequeño alemán tiene bastantes papeletas para convertirse en un producto de éxito. Cualquier cosa que huela a todocamino triunfa en el panorama actual, y si se presenta en un envoltorio de calidad con un precio acorde, más posibilidades tienen aún de hacerlo. El nuevo Q2 es un SUV de dimensiones reducidas (mide 4,19 metros, una longitud similar a la de un Nissan Juke), que ofrece espacio para cinco ocupantes en su interior y un más que correcto maletero de 405 litros. Delante se viaja con holgura; detrás, no tanto, pero esto es algo normal debido a la talla reducida del coche. A estas alturas, algunos se preguntarán a quién va dirigido este pequeño todocamino. La respuesta es que, en principio, su cliente potencial es alguien joven que piensa en la practicidad del día a día y en el ocio de fin de semana. Un usuario que no necesita grandes dosis de espacio, pero que sí presta especial atención a otros aspectos como el diseño o la conectividad. “Gente de entre 20 y 40 años”, comenta a elEconomista un responsable de la marca. Detalles de categoría superior Sin embargo -y esto ya lo decimos nosotros-, sus aspiraciones pueden ir un paso más allá. Probablemente haya otro tipo de comprador al que pudiera interesar este pequeño todocamino. Hablamos de personas mayores, liberadas de cargas familiares y con la vista puesta en un coche cómodo pero de dimensiones nada aparatosas. De lo que no hay duda alguna es del giro en diseño que ha dado Audi con el Q2. Afortunadamente, huye del aire de familia, algo aburrido, de todos los demás modelos de la gama. Aquí hay un punto de atrevimiento y distinción, que hace que el pequeño SUV se desmarque. La tecnología aplicada al móvil y a los asistentes de conducción está bien presente, y si hablamos de motores, las versiones a elegir son tres diésel TDI -116, 150 y 190 CV- y otros de gasolina TFSI con idénticas cifras de potencia. La transmisión automática S tronic de doble embrague y la tracción total quattro forman parte de la oferta mecánica. Ágil entre curvas, cómodo en autopista y práctico en ciudad, el Audi Q2 admite pedidos desde este verano, aunque las primeras unidades no llegarán a los concesionarios hasta bien entrado el otoño. Su precio de partida es de 25.950 euros para el 1.0 TFSI de 116 caballos.