Ha vendido un solar de la fábrica vizcaína Sefanitro, que empleaba a 116 personasbilbao. Pocas veces la denegación de un permiso de actividad resulta tan rentable para una empresa. El Grupo Villar Mir ha ingresado, a través de su filial Fertiberia, 240 millones de euros por la venta de los terrenos de la fábrica vizcaína Sefanitro.Se trataba de unas instalaciones de productos químicos, fertilizantes y abonos, que por las normas medioambientales europeas no podía continuar la actividad en pleno casco urbano. La factoría Sefanitro, integrada en Fertiberia, que a su vez está controlada por el Grupo Viullar Mir, había quedado absorbida por el casco urbano de Barakaldo. La denegación de la licencia llevó consigo el cierre de la planta en julio. El expediente de regulación de empleo se solucionó con 67 jubilaciones; 15 traslados a las plantas de Asturias, 12 recolocaciones y 25 bajas incentivadas. El cierre de Sefanitro-Fertiberia desencadenó una intensa polémica en el País Vasco, que aún perdura. Fertiberia asegura que cerró la planta porque se le denegó la licencia; el Ayuntamiento de Barakaldo dice que no podía renovar la licencia por la ley comunitaria; y la Diputación acusa a Fertiberia de pelotazo inmobiliario por no reinvertir las plusvalías de la venta de los terrenos en una nueva fábrica.Villar Mir adquirió la fábrica de Barakaldo en 1996, gracias a la privatización de Sefanitro por parte del Ministerio de Industria, por 5,4 millones de euros, y ahora la venta de los terrenos le reporta 240 millones. El solar de 208.000 metros cuadrados lo han comprado los grupos promotores Iurbentia y Afer, y en él tienen previsto construir 2.000 viviendas.