La ‘teleco’ anuncia la creación de 300 nuevos puestos para atención al clienteOrange España tiene previsto aplicar su Expediente de Regulación de Empleo (ERE) sobre 550 empleados, ajuste que empezará a negociar con los sindicatos a partir del próximo 8 de febrero, fecha de su integración efectiva con Jazztel. La supresión de puestos de trabajo responde a la existencia de duplicidades en el reforzado grupo, según informan fuentes cercanas a la empresa. Las mismas también añaden que la compañía tiene la voluntad de admitir bajas voluntarias. Pese a lo anterior, Orange ha precisado que el impacto neto en la compañía será de 250 puestos, ya que está prevista la contratación de 300 profesionales para reforzar los servicios de atención al cliente en las oficinas de Oviedo y Guadalajara. Al cierre de 2015, la suma de las plantillas de Orange y Jazztel alcanzan los 7.084 empleados, por lo que el recorte laboral efectivo, con esa creación de nuevos empleos, será del 3,5 por ciento. La cifra de 550 despidos supera en un 37 por ciento el dato inicialmente previsto por la compañía, tras el anuncio de compra de Jazztel, en septiembre de 2014, que entonces se estimó en 400 puestos. Según informan fuentes sindicales, la ley fija un plazo máximo de 15 días, a contar desde hoy, para que la representación legal de los trabajadores designe a sus miembros en la Comisión Negociadora. Una vez superado este periodo se iniciará la fase consultas, que tendrá una duración máxima de 30 días. Por todo lo anterior, la finalización de la negociación se estima para la segunda semana de marzo. Al contrario que otros ajustes, el ERE de Orange-Jazztel no responde a cuestiones económicas ni de mercado. Así, los sindicatos apuntan que la empresa ha realizado “un análisis en profundidad del empleo con el fin de seguir con la actividad de la empresa de la forma más eficiente y competitiva posible”. También indican que “las conclusiones de este análisis ponen de manifiesto ciertas duplicidades y solapes en varias funciones, así como la oportunidad de incrementar el empleo en los centros de atención al cliente propios en España”. Los centros de las provincias de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Valladolid serán los más afectados, pero sin que por ahora se hayan precisado áreas ni servicios. Además, quedan excluidos el resto de los centros de trabajo de Orange en España, así como los empleos de las tiendas propias que la compañía tiene en nuestro país, la plantilla de Simyo y Orange Catalunya Xarxes de Telecomunicacions. El plan tampoco afecta a las plataformas de atención al cliente propias de Guadalajara, Oviedo y Bogotá.