Antonio Catalán, presidente de la firma asegura que abrirán un establecimiento cada semanaTras comprar Starwood, la cadena se prepara para aterrizar en el segmento vacacional La expansión de AC Hotels by Marriott es imparable. Sólo este año la cadena espera abrir en franquicia 42 hoteles en Estados Unidos, lo que supondría multiplicar por cuatro su presencia en el país, ya que actualmente cuenta con nueve establecimientos, situados en Chicago, Kansas City, Miami, New Orleans y Washington. “Tenemos un equipo de 600 personas buscando nuevos hoteles en Estados Unidos”, asegura Antonio Catalán, presidente y fundador de la firma, que prevé que este año va a ser “fantástico” para la cadena. El ritmo de expansión del grupo es frenético, “abriremos un hotel cada semana en Estados Unidos, claramente es nuestra gran apuesta”, explica en una entrevista para elEconomista. Pero la compañía no se queda ahí y también está llevando su modelo de hotel a Latinoamérica. “Abriremos tres en Brasil con motivo de los Juegos Olímpicos y entre este mes y el siguiente vamos a inaugurar otro en Panamá”. Todos estos planes de crecimiento han sido posibles gracias a la alianza de la cadena española con Marriott, que se acercó al empresario navarro cuando más lo necesitaba. En plena crisis, Catalán logro cerrar un acuerdo con este gigante del sector, que inyectó 100 millones de euros para quedarse con el 50 por ciento del capital de la compañía. Esta operación cambió por completo el camino del grupo español, que actualmente es el único socio de la mayor cadena hotelera del mundo. “Marriott nos ayudó a salir del atolladero y ser su único socio nos sitúa en una magnífica situación, ya que nuestra relación con ellos es magnífica”. Objetivo: Asia Según explica Catalán, Asia es su asignatura pendiente. Sin embargo el grupo ya está trabajando para solucionar esta situación. “Llevamos tiempo estudiando este tema y estamos muy cerca de firmar el primer hotel en China”, explica el directivo, que considera que su modelo de establecimiento puede encajar a la perfección en los países asiáticos. “Nuestro formato de cuatro estrellas es fácil, sin complicaciones y está teniendo mucho éxito. La clave está en que nos adaptamos completamente a las necesidades y podemos tener desde un hotel de 850 habitaciones en Copenhague a otro en Recoletos en Madrid con 69, somos muy flexibles”. El directivo asegura que esto les ha permitido abrir en plazas complicadas, como Tel Aviv o Jerusalén, ya que aunque tienen una seria de características comunes, saben que no en todas las ciudades se tienen las mismas necesidades. “Una vez arranquemos la maquinaria estoy seguro de que el año que viene podré anunciar que hemos firmado entre 15 y 20 hoteles más en Asia”. Pero el crecimiento de AC Hotels no sólo se centra en el extranjero, también en el mercado nacional están ultimando varios proyectos. Concretamente están cerca de cerrar tres en Madrid y “varias franquicias en Barcelona”, donde a pesar de la moratoria turística esperan cambiar de uso dos inmuebles para transformarlos en hoteles. Además, “estamos detrás de Bilbao, una ciudad en la que ya deberíamos estar, y probablemente cerremos una operación pronto”. Málaga es otro de sus objetivos. Según Catalán, el negocio en España fue muy bien en 2015 y espera que mejore en 2016. “Estamos muy fuertes en Barcelona y Madrid también va a ir bien”. El directivo explica que “lamentablemente España se está beneficiando en parte de los ataques terroristas en París, dónde nuestra ocupación ha caído un 30 por ciento desde los atentados”. Respecto a la incertidumbre política que se vive actualmente en España tras las últimas elecciones generales, Catalán no se muestra preocupado, “esta situación no es positiva para el país, pero no creo que termine afectando al sector turístico”. De momento, las previsiones de resultados de 2015 reflejan un panorama de recuperación, ya que las ventas de la cadena en España han crecido alrededor de un 13 por ciento en hoteles comparables, “con las nuevas aperturas será algo más” y ha alcanzado un ebitda de unos 70 millones de euros. Entrar en el vacacional Hace apenas dos mes, Marriott cerró la compra de Starwood, una operación de más de 11.300 millones que le llevó a convertirse en la mayor cadena hotelera del mundo. Actualmente el grupo está centrado en la integración de las dos compañías, pero Catalán asegura que a medio plazo el su objetivo pasa por entrar en el segmento vacacional. “Estamos analizando con Marriott la posibilidad de lanzar una marca vacacional o utilizar una de las que ya tenemos o hemos adquirido”. Según el directivo, el lanzamiento de la misma iría ligado a uno o varios proyectos.