Las entidades, que ayer formaron el comité director, se oponen a dar más dineroAbengoa ha pedido a las entidades financieras acreedoras una nueva línea de liquidez por un importe de alrededor de 600 millones de euros para poder hacer frente a los pagos a proveedores más inmediatos, según señalan a este diario fuentes conocedoras de las negociaciones. La banca, sin embargo, no está dispuesta a reabrir el grifo a la firma andaluza, que desde el pasado miércoles, 25 de noviembre, se halla en situación de preconcurso de acreedores. Ayer, las entidades se reunieron por primera vez con KPMG para conformar el comité director que, presidido por el Santander, coordinará las negociaciones para la reestructuración de la deuda del grupo andaluz, cuyo horizonte más probable dibuja la declaración del concurso -antigua suspensión de pagos-. Con los 600 millones solicitados a los bancos, la compañía que preside José Domínguez Abascal estima que podrá afrontar el pago a proveedores durante los cuatro meses que establece el preconcurso de acreedores. Estos costes incluyen facturas básicas como la luz, el agua o el teléfono de sus oficinas, o las nóminas de los trabajadores. Hasta septiembre, Abengoa tenía pendiente el pago de 5.469 millones con proveedores, ligeramente por debajo de los 5.555 millones que sumaba en 2014. El grueso -4.105 millones- lo concentra los proveedores comerciales. Los anticipos a clientes suman 225,3 millones. Los bancos, en todo caso, no están por la labor de prestar más dinero a Abengoa, según señalan fuentes próximas al proceso. En septiembre, en el marco del acuerdo para ampliar capital de 650 millones -operación que hoy ha quedado suspendida-, las cinco entidades españolas más expuestas a la deuda del grupo sevillano (el Santander, Caixabank, Bankia, Popular y Sabadell) ya concedieron una línea de liquidez de 165 millones. La compañía, que en aquel momento estaba dirigida por Felipe Benjumea (presidente) y Santiago Seage (consejero delegado), aseguró que las necesidades de financiación no eran urgentes. Sin embargo, al día siguiente de conceder la línea, la empresa dispuso del importe íntegro. Ante las dudas generadas, los bancos españoles contrataron a KPMG para que analizara las necesidades reales de liquidez. El resultado de la auditora arrojó una horquilla de entre 150 millones y 350 millones. Estos cinco bancos, con el Santander al frente, conformarán el comité director de la reestructuración de la deuda de Abengoa. Podría entrar algún banco extranjero, como HSBC, pero al cierre de esta edición la reunión con de las entidades con KPMG no había concluido y no se había adoptado una decisión en esta línea. El encuentro sirvió para sentar las bases sobre las que definir la hoja de ruta que seguirán en la reestructuración de la compañía, cuyo desenlace está abocado, según las fuentes consultadas, a la firma de un convenio de acreedores, con quitas muy importantes y la capitalización de la deuda. Por otra parte, Blackrock y Sothic Capital han elegido a Houlihan Lockey y Clifford Chance para que les represente ante la empresa con la intención de recuperar el dinero invertido en diversas emisiones de bonos. Abengoa además comunicó ayer a las bolsas de Londres y Luxemburgo su decisión de presentar preconcurso. Según los datos que figuran en la bolsa, la compañía mantiene emisiones por 2.840 millones de euros y por 1.679 millones de dólares ( 1.588 millones de euros), es decir, en total cerca de 4.500 millones. Hoy está previsto que se celebre una segunda reunión de los bonistas, así como otro encuentro de la Asociación Internacional que regula los swaps para decidir en qué momento se considera que ha presentado la bancarrota.