El operador mejora su rentabilidad y cumple un año antes su objetivo de sinergias El cambio de ciclo en Vodafone España ya se refleja en las cuentas del último trimestre: el operador ha vuelto a crecer en ingresos tras siete años seguidos de caídas interanuales de las ventas. Hay que remontarse al segundo trimestre de 2008 para encontrar el último dato positivo en cuanto a evolución de las ventas de la segunda mayor teleco española. Precisamente, el punto de inflexión que ayer anunció Vodafone coincide con el disfrutado el pasado viernes por Movistar, líder del sector, que también recuperó la senda de crecimiento desde antes de la crisis. Según las cuentas del segundo trimestre del ejercicio, Vodafone España facturó un total de 1.254 millones de euros entre los pasados meses de julio a septiembre, lo que presenta un incremento del 1,1 por ciento respecto al mismo periodo del año pasado. “Hemos conseguido el objetivo número uno, que consistía en crecer en ingresos”, se felicitó Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone España, en la presentación de los resultados de la filial. Crece la rentabilidad Coimbra también destacó el aumento de la rentabilidad de la compañía, en gran parte por el incremento de ingresos, así como por la reducción de costes, el nuevo modelo de financiación de los terminales y las sinergias derivadas de la integración de Ono. A pesar de la subida de los costes de los contenidos de televisión, el ebitda de Vodafone España aumentó el 16,3 por ciento en el primer semestre del año anterior, con un margen de rentabilidad que se incrementó en 3,7 puntos porcentuales, hasta el 2,5 por ciento en términos interanuales. En el mismo encuentro con la prensa, Coimbra aseguró que Vodafone España logrará cumplir en marzo de 2016 el 100 por cien de las sinergias anunciadas tras la adquisición de Ono, fijadas entonces en 240 millones de euros, lo que representa un año de adelanto sobre el calendario inicial. Según los resultados de la filial, la inversión de Vodafone España rozó el crecimiento de dos dígitos, con un repunte del 9,1 por ciento, hasta los 458 millones de euros, con una especial incidencia en el 4G, cuya cobertura supera el 84 por ciento de la población española. Coimbra desveló que la cartera de clientes de su operador aumentó en 85.000 abonados en el último trimestre, lo que permite cerrar el pasado septiembre con más de 14,6 millones de clientes móviles. Respecto a la banda ancha fija, los suscriptores superan los 2,87 millones de líneas, de los que 1,81 millones son clientes de fibra, un número que ha aumentado en más de 48.000 en el último trimestre. En la actualidad, Vodafone reconoce que ha realizado despliegue de fibra óptica en ocho millones de unidades inmobiliarias. El negocio de la televisión de pago de Vodafone España ya supera los 902.000 clientes, tras un último trimestre en el que aumentó la cartera audiovisual en 77.600 abonados. “Nuestra gran apuesta es rentabilizar los servicios de televisión y lo estamos logrando gracias a la plataforma “más potente del mercado” y “los contenidos”, recalcó el directivo. En opinión de Coimbra, “Vodafone es el único operador que puede ofrecer todos los contenidos de fútbol en una plataforma de calidad que funciona cine”. Con vistas al futuro inmediato, Coimbra ha dejado la puerta abierta para que Vodafone puje por los derechos de la Liga y la Copa del Rey de las tres próximas temporadas. Sin embargo, el operador apunta que “desconoce las condiciones de la subasta”, al tiempo que afirma “tener claro que Vodafone pondrá a disposición de los clientes una oferta competitiva”, y eso incluye tener los derechos del fútbol, ya sea pujando en la subasta, a través de la regulación como sucede en la actual temporada o con acuerdos con los futuros proveedores. El primer ejecutivo de Vodafone España también recordó la apuesta de su operador por Netflix, así como su empeño por reformar por completo los puntos de venta del operador, “transformando el espacio, los procesos de venta, atención y asesoramiento al cliente”.