Le sustituye Rossi, alegido en mayo para limpiar el honor del fútbol transalpinomadrid. De nuevo con los modos y maneras de la Administración italiana. Marco Tronchetti Provera, presidente de Telecom Italia, no ha soportado la presión y se va. Le dibujó un plan a la teleco transalpina que no ha gustado al Gobierno de Romano Prodi, que ha llegado a amenazar con utilizar la 'acción de oro'. El plan pasaba por dividir Telecom en dos, con el riesgo de que finalmente se vendiese la joya del grupo: la operadora de telefonía móvil TIM y su filial en Brasil. Telecom quería dedicarse al negocio de los contenidos y tenía cerrado incluso un acuerdo con Rupert Murdoch. Ayer los rumores apuntaban incluso a que el antiguo monopolio telefónico italiano comprase AOL Alemania. El propio regulador de las telecomunicaciones del país pidió una reunión formal para que explicasen los planes de reestructuración. Ayer, Tronchetti anunció su marcha y antes de que se conociese la noticia, empezaba a sonar el nombre de su sustituto. Éste podría ser Guido Rossi, ex presidente de la autoridad bursátil transalpina y designado presidente de la Federación Italiana de Fútbol en mayo de este año, con el encargo de limpiar la imagen de la Federación tras saltar a los medios el escándalo sobre los presuntos partidos 'amañados'.Su llegada a Telecom Italia, de confirmarse, más que para innovaciones se espera que sea para dar continuidad a lo que ha sido el grupo hasta ahora. Tendrá, eso sí, que diseñar un plan para hacer frente a los 41.000 millones de deuda que atenazan al grupo y que Tronchetti quería mitigar con la venta de TIM y la de la filial brasileña. Ayer precisamente se confirmaba el interés del magnate mexicano Carlos Slim por TIM Brasil, una firma de móvil que cuenta con una red GSM, tecnología que Telefónica está desplegando con su brasileña Vivo.Telecom Italia celebró ayer un consejo de administración extraordinario. Fue el último de Tronchetti, presidente también del máximo accionista de Telecom, Pirelli. Su plan ha desatado la ira nacional italiana. Incluso Prodi ha sido reclamado para acudir al Parlamento a explicar si conocía los planes. No irá. Quizás ya no hace falta.