Está en negociaciones con los propietarios de los diez hoteles que tiene en el paísLa cadena española Riu está estudiando su salida de Túnez, donde tiene diez hoteles, tras el atentado yihadista que se produjo el pasado mes de junio en uno de sus establecimientos y que supuso la muerte de 38 turistas. "El país atraviesa una situación complicada y estamos analizando caso por caso con los propietarios de cada uno de los hoteles", reconocieron ayer desde la compañía. Así, explicaron a elEconomista que actualmente tres de sus establecimientos se encuentran cerrados "debido a la baja ocupación y permanecerán así, de momento, durante la temporada de invierno". Se trata del ClubHotel Riu Bellevue Park, situado en Port El Kantaoui, el Riu Marillia de Hammamet y el ClubHotel Riu Palm Azur, ubicado en Djerba. Asimismo, otro de sus hoteles permanece cerrado por reformas desde hace unos dos años, ya que "sufrió un derrumbe y prácticamente ha vuelto a construirse desde cero". La previsión del grupo mallorquín es que vuelva a abrir sus puertas en 2016, pero aún no saben si en ese momento seguirá bajo la gestión de Riu. Dan por cerrada su salida Aunque la compañía asegura que la decisión todavía no está tomada, fuentes locales en Túnez han confirmado a Efe que Riu, presente en el país africano desde 1999, ha decidido abandonar sus negocios en ese territorio. Así, las mismas fuentes indican que la cadena cesará sus operaciones a partir de enero de 2016 en los diez hoteles que gestiona en el país norteafricano, incluido el hotel Marhaba Imperial, en Kantaui-Susa, escenario de la matanza. Tres meses antes, otros dos yihadistas habían perpetrado una masacre similar en el museo El Bardo de la capital tunecina, donde asesinaron a 21 turistas extranjeros. TUI Group, que cuenta entre sus principales accionistas con la cadena hotelera RIU, afrontó un coste de 10 millones de euros por la cancelación y repatriación de turistas derivada del ataque sufrido en Túnez el pasado mes de junio De acuerdo con la radio local Shems FM, la cadena ha aceptado indemnizar a sus trabajadores, según los parámetros de la ley laboral tunecina, y compensar a sus socios por la ruptura de los contratos de explotación y gestión. La cadena mallorquina es una de las españolas más consolidada en el país, donde la mayoría de sus hoteles son de cinco estrellas y cuentan con régimen de todo incluido. Otras de las compañías españolas que también tienen presencia en Túnez son la cadena Vincci, con seis resorts de cuatro y cinco estrellas, e Iberostar, que gestiona en la actualidad cuatro hoteles en Túnez, donde están presentes desde el año 2001. Esta última explicó ayer a este periódico que "mantenemos una relación histórica y empresarial con el país desde hace 15 años, y queremos seguir apostando por el destino, por lo que nuestro compromiso sigue siendo firme". Así, aseguran que "a pesar de ser conscientes de las dificultades que atraviesa el país, queremos seguir apoyándoles y acompañándoles en estos momentos tan complicados".