Las empresas luchan por cuatro bloques de 90 MW y REE entrega otros cuatro, frente a uno en el año pasadoMenos competencia empresarial en la subasta por el servicio de interrumpiblidad del sistema eléctrico para el año 2016. Si en la puja celebrada el año pasado las empresas compitieron por ocho bloques de 90 MW y REE sólo tuvo que entregar uno de forma directa, en esta ocasión las compañías sólo han luchado por cuatro bloques y REE ha tenido que otorgar directamente los otros cuatro. Además, únicamente se han adjudicado 50 bloques de 5 MW, eso sí, todos en compentencia. La subasta se celebró ayer en el Pabellón 6 del recinto ferial de Madrid. REE, el gestor técnico del sistma ofertaba menos potencia que el año pasado, y a menos precio de salida en la puja, de tipo descendente, como en una lonja de pescado. Si el año pasado se ofertaban 810 MW en lotes de 90 MW, éste sólo se han ofertado 760 MW. Y si hubo 2.210 MW en lotes de 5 MW en 2014, este 2015 sólo había 1.880 MW. En cuanto a los precios de salida, si en 2014 el precio de los 90 MW fue de 350.000 euros -se adjudicaron por 295.000-, este año ha sido de 340.000; en cuanto al producto de 5 MW, en 2014 comenzó a 260.000 euros -cerró a 95.000 euros- y este año ha comenzado a 200.000. Se desconocen los precios medios de adjudicación de este año, porque la subasta aún no ha terminado: se van a licitar otros 326 bloques de 5 MW -1.630 MW- hasta el próximo 4 de septiembre. Plantas inhabilitadas Este año han participado 131 instalaciones interrumpibles, frente a las 139 de 2014, es decir, ocho menos. Casi todas, sino todas, han sido inhabilitadas por el Ministerio de Industria por no haber respondido a los requerimientos de REE; entre los pocos nombres que han trascendido está la química Solvay y las papeleras Torraspapel y Saica. La interrumpibilidad es un mecanismo de seguridad del sistema eléctrico. En 2015 tiene un coste de 550 millones.