El grupo gana pese a ello el 34% más, hasta 1.524 millones Airbus ha seguido en el primer semestre del año en la misma tónica que durante 2014: sólidos resultados a escala corporativa junto a un impacto negativo de los problemas industriales del A400M, cuyo máximo ejemplo ha sido el accidente del pasado 9 de mayo. Así, mientras el gigante aeronáutico europeo informaba de que sus ingresos crecían al 6 por ciento, a 28.900 millones de euros, detallaba que ha realizado un cargo neto de 290 millones para compensar las pérdidas derivadas de los problemas causados por el accidente en la fabricación del avión y en la entrega del mismo con las capacidades militares previstas (se retrasarán). En 2014 ya se anotó una dotación de 551 millones por problemas con el avión militar que se ensambla en Sevilla. Los beneficios crecieron, con todo, hasta 1.524 millones, un 34 por ciento más. La compañía recibió 348 millones de nuevos pedidos en firme, un 20 por ciento más que el pasado año, lo que elevó el valor de la cartera de pedidos un 8 por ciento, hasta los 927.000 millones. Airbus renegocia también con los clientes del A400M cómo repercutir al menos parte de los sobrecostes en el precio final.