Italia corre el riesgo de pagar 11.000 millones más de intereses sobre la deudaMatteo Renzi prefiere mostrarse optimista de cara a las dificultades. Por esto la semana pasada, frente a las turbulencias financieras debidas al pulso entre Grecia y sus acreedores, quiso asegurar que Roma no "está en la línea de fuego". Según ha explicado el mandatario "las reformas son el verdadero fondo de rescate de Italia". La realidad, sin embargo, es mucho más compleja. El país transalpino ya ha empezado a percibir sobre su deuda los temblores del terremoto helénico: en la subasta del pasado martes el Tesoro italiano consiguió vender todos los 2.800 millones de Bonos a 5 y 10 años previstos, pero con un tipo de interés que llegó al 2,35 por ciento, el nivel máximo desde 2014, mientras el diferencial con el Bund alemán subía hasta los 165 puntos. Esto no significa que la situación esté fuera de control, pero indica que la presión sobre la abultada deuda transalpina vuelve a aumentar. Si el diferencial sigue subiendo Roma tendrá que rehacer sus cuentas aumentando el presupuesto para el pago de intereses: según las estimaciones recién difundidas por la agencia de rating Standard&Poors la crisis griega podría costarle a Italia 11.000 millones de euros más de intereses sobre la deuda hasta 2016. El problema es que, aunque sin contar los posibles efectos negativos del pulso entre Atenas y sus acreedores, las cuentas transalpinas no están en orden como Renzi aparenta. A pesar de salir de largos años de esfuerzo presupuestario, el país tendrá todavía que aprobar nuevos recortes. El primer ministro ha confirmado la necesidad de recaudar unos 20.000 millones de euros en los Presupuestos para 2016. Gran parte se debe a la cláusula de salvaguardia introducida por el Gobierno en los Presupuestos de 2015. El año pasado el Ejecutivo de Renzi garantizó la sostenibilidad de las cuentas en el medio término introduciendo subidas progresivas del IVA a partir de 2016. Ahora el primer ministro, si no quiere que el tipo de ese impuesto llegue hasta el 24 por ciento, tendrá que recaudar al menos 16.000 millones de euros. Italia tiene que encontrar unos 800 millones adicionales después de que Bruselas suspendió un paquete de medidas impulsadas por Roma con el fin de combatir el fraude fiscal. Otras necesidades financieras se deben a las últimas sentencias del Tribunal Constitucional, que imponen al Ejecutivo italiano subir las pensiones y el sueldo de los funcionarios (más de 2.000 millones de gasto adicional). Según los analistas transalpinos, el Gobierno piensa recaudar fondos aumentando el déficit (sin superar los límites europeos). Italia ha salido del túnel sobre todo gracias a la mejora del escenario europeo (el euro débil que ayuda a las exportaciones y las inyecciones de liquidez del BCE). En caso de un empeoramiento de la situación de la eurozona el optimismo de Renzi y sus maniobras arriesgadas podrían no ser suficientes para proteger al país del contagio griego.