La eléctrica necesitaría convocar una junta para retirar las denuncias contra Gas NaturalLa CEOE pide al Gobierno que no intervenga y CiU reclama ya la comparecencia de Closmadrid. Endesa está dispuesta a arruinarle al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el "final feliz" de la opa. La compañía se plantea mantener el bloqueo al acuerdo que ratificará hoy el presidente del Gobierno con Angela Merkel si éste no es beneficioso para sus accionistas, en coherencia con las actuaciones que la empresa ha llevado a cabo hasta el momento para lograr que la oferta de Gas Natural, de 21,3 euros por acción, se superase.El presidente de Endesa, Manuel Pizarro, ha mostrado su intención de seguir con el proyecto de la eléctrica en solitario al considerar que crea más valor para los accionistas.Pizarro ha insistido en numerosas ocasiones en que Endesa vale más de 30 euros por título y parece que está dispuesto a seguir dando batalla hasta que alguien pague dicho precio por la empresa.La llave de la opaEndesa tiene en estos momentos la llave de la opa. La compañía tiene paralizada la oferta de Gas Natural y de E.ON por las dos denuncias que interpuso: la primera en el Juzgado de lo Mercántil de Madrid por el pacto de la gasista catalana con Iberdrola y la segunda, la que interpuso ante el Tribunal Supremo por las condiciones que el Consejo de Ministros impuso a Gas Natural para poder comprar la primera eléctrica española.El consejo de Endesa decidió entonces por unanimidad poner el aval de 1.000 millones de euros para que las medidas cautelares siguiesen adelante y en esa misma unión podrían seguir bloqueando la operación. Aún así, la verdad es que ni tan siquiera Endesa tiene todas las cartas, porque aún en el caso en el que retirara sendas denuncias, el Supremo podría seguir analizando el caso.Esta situación, no obstante, tiene otro punto abierto y es que el Constitucional está analizando los recursos de Iberdrola y Gas Natural sobre la decisión del Consejo de Ministros.Endesa además debería convocar una junta de accionistas para decidir si retira o no sus denuncias. Por otro lado, Gas Natural podría jugar también un papel importante. Si la gasista retirara su oferta podría despejar casi automáticamente el camino de E.ON, pero el presidente de la CNMV, Manuel Conthé, ha asegurado que la opa no puede retirarse con facilidad.El pacto no ha gustado en los cuarteles generales de la eléctrica porque incluiría la posibilidad de nombrar a un ejecutivo afín al Gobierno, una situación que ha creado fricciones entre la eléctrica alemana y la española. El presidente de la CEOE, José María Cuevas, reclamó al Gobierno español, al alemán y a la Comisión Europea que intervengan lo "menos posible" en la opa y deje que decidan las empresas y los accionistas.El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, afirmó ayer que el presidente del Gobierno y la canciller alemana, Angela Merkel, desean "favorecer" una interlocución que permita una "solución satisfactoria" a la opa de E.ON. Moraleda insistió en que las conversaciones incumben a las empresas implicadas, aunque ambos Gobiernos "desean encontrar y favorecer, no negociar, porque no es posible y está prohibido por el Derecho comunitario, la interlocución para encontrar una solución satisfactoria para ambos países y para el sector energético español, europeo y alemán". Por contra, el presidente del PP, Mariano Rajoy, auguró que el "final feliz" consistirá en eliminar las condiciones que se le impusieron a E.ON y dar vía libre a la operación. Rajoy recordó que Zapatero llegó a tomar partido por Gas Natural, a establecer nuevas normas para poder intentar una opa sobre otra compañía que perjudicaban a E.ON y a sufrir dos expedientes de la Unión Europea. Comparecencia de ClosPor su parte, CiU quiere que el nuevo ministro de Industria, Joan Clos, dé explicaciones en el Congreso sobre los "profundos cambios de criterio" del Gobierno. El portavoz de Industria de CiU en la Cámara Baja, Josep Sánchez Llibre, quiere que Clos informe ante la comisión correspondiente sobre las consecuencias de la opa para la economía española "desde la perspectiva de pérdida de peso de un sector económico clave para el futuro como es el energético". El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, eludió ayer dar cuenta de los resultados de la Cumbre euro-asiática de ASEM que ha reunido a 38 jefes de Estado y de Gobierno entre en Helsinki. Zapatero evita así dar explicaciones de las conversaciones mantenidas con Merkel.