Es el dueño de 48 de los 100 millones en cuentas sospechosas de blanqueoLas denuncias sobre operaciones de blanqueo de capitales de Estados Unidos que se han llevado por delante al andorrano BPA, certificando la defunción sobrevenida de Banco Madrid, empiezan a cuestionarse. El organismo de lucha contra delitos financieros del Tesoro de Estados Unidos (FinCEN) infirió que era una máquina de blanqueo en un relato donde expuso tres operaciones concretas con clientes. La principal en cuantía corresponde al ruso Andrey Petrov, detenido en 2013 en Lloret del Mar en el marco de la Operación Clotilde y que el juez decidió poner en libertad el pasado 15 de enero bajo fianza de tan solo 80.000 euros. Su cuenta resultó bloqueada en BPA con 48 de los 100 millones propiedad de los clientes sospechosos para el FinCEM cuando se decretó su arresto como presunto líder de una red de blanqueo de la mafia rusa. Según el FinCEM, BPA dio "sustancial asistencia" desde 2011 a Petrov, al que un gestor le garantizó crédito en un banco español sin que utilización levantase sospechas, tras el rechazo de otra entidad. Esa gestión, según la denuncia americana, fue crucial para que el banquero contactase con cabecillas de organizaciones criminales en Rusia. Viajes a Rusia En fuentes próximas a la antigua gerencia de BPA reconocen el envío en tres ocasiones de ejecutivos al país, pero para conocer la empresa de servicios a gaseoductos participada por Petrov y a sus directivos. Querían, arguyen, verificar la procedencia de los cuantiosos réditos de la firma que ingresaba en una cuenta abierta en 2003 en Andorra con el argumento de proteger el patrimonio. En 2012 Banco Madrid financia su proyecto de construir un Mercadona con un millón de euros, cuya concesión queda pignorada a la renta y ganancias del local. Su detención interrumpe relación y congela la cuenta. El FinCEM alerta que otro empleado de BPA aceptó sobornos para procesar transacciones en efectivo masivas de Gao Ping, detenido igualmente en nuestro país en 2012 por blanqueo de la mafia china. Su relación se establece, refieren fuentes próximas a BPA, en 2006 por el interés de Gao Ping de oculta a Hacienda la facturación, en gran parte en efectivo, de almacenes dedicados a la importación de artículos, sobre todo textil, de China que vendían a mercadillos y tiendas. En aquel momento Andorra ofrecía opacidad bancaria. En la antigua gerencia de BPA sostienen que paran su operativa cuando el país pacta con España el fin al secreto bancario en 2010. Y, sostienen, la entidad llega a prohibir después las cuentas con ciudadanos chinos de su entorno tras advertir el intento de Gao Ping de mantener operativa a través de sus proveedores. Escándalo de Venezuela El tercer gran escándalo cifra en 2.000 millones el dinero blanqueado vinculado con Venezuela, con esquemas de empresas fantasmas y complejos productos financieros para desviar fondos. En BPA reconocen varias operaciones. En una contactan al banco para depositar dinero en una cuenta sacado en valija con pasaporte diplomático y perteneciente a empresarios que quieren poner su patrimonio a buen recaudo ante el riesgo de expropiación en Venezuela. La cuenta, detallan, se abrió con 500.000 dólares y la bloquearon al segundo ingreso de 700.000 porque no aportaron documentación suficiente. El banco es el que promueve, según sostienen las mismas fuentes, la detención en 2010 del excomisario antidroga en Venezuela, Norman Puerta Varela, al que aperturaron cuenta donde tenía 1,3 millones por no saltar las alertas en los listados antiblanqueo. Pero una vez identificado, refieren, alertaron a las autoridades cuando acudió a una oficina facilitando su detención, y despidieron a los empleados que llevaron al cliente.