El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, calificó ayer el contrato del almacén de gas Castor como "un disparate", pero justificó la decisión del Tribunal Supremo (TS) del pago de la indemnización de 1.350 millones de euros a la firma Escal UGS -participada al 66,6 por ciento por ACS, la constructora de Florentino Pérez, y que fue su propietaria hasta julio del pasado año- "porque había que cumplirlo". De esta forma, el titular de la cartera de Industria responde a la resolución del Parlamento Europeo que fue aprobada la pasada semana y que "insta a la Comisión y al Banco Europeo de Inversiones (BEI) a que tomen medidas a fin de evitar que los ciudadanos tengan que abonar, bien mediante un déficit público más eleveado, bien mediante el aumento de los costes de la energía, 1.350 millones de euros en compensaciones por un proyecto precedido por una evaluación desastrosa". No obstante, el ministro no hizo ninguna referencia la forma en la que se pagará dicha indemnización -así como los intereses y el mantenimiento del almacén de gas-.