La entidad confía la división a Salvador Grané, quién ya dirigió Landscapemadrid. Dicen que los momentos de crisis pueden convertirse en el trampolín de quien sepa aprovechar sus oportunidades. Y Banco Sabadell ha puesto toda la maquinaria en marcha para hacerlo. La entidad catalana pretende aprovechar la crisis inmobiliaria para regenerar su negocio patrimonial y residencial. Es decir, para crear una nueva Landscape. Fue en octubre de 2006 cuando la entidad presidida por Josep Oliu destapó sus intenciones de vender su filial inmobiliaria. Eran otros tiempos. El sector estaba en su punto álgido y cinco grandes compañías -Metrovacesa, Urbis, Colonial, Parquesol y Fadesa-, acababan de haber sido engullidas por competidores a golpe de multimillonario talonario. Sabadell no desaprovechó la oportunidad y vendió su inmobiliaria a Astroc por 993 millones de euros, que le dejaron una plusvalía de 624 millones de euros. La filial, entonces dirigida por Salvador Grané, se convirtió así en el surtidor de gasolina que necesitaba la entidad para hacer frente a la compra de Banco Urquijo. Nubarrones en el horizonte Pero las tornas han cambiado de forma radical. Menos de dos años después, el sector inmobiliario atraviesa una grave crisis que amenaza con llevarse por delante a muchas compañías, que deberán sacar a subasta sus activos; mientras que otras venderán gran parte de su cartera a bajo precio, para evitar el concurso de acreedores. Aunque la peor cara de la crisis la vivirán los propietarios, que no puedan hacer frente a sus hipotecas y verán como el banco les embarga su piso. Consciente de este escenario, en Sabadell han empezado a prepararse, según han reconocido fuentes del banco. Primero, han recuperado a Salvador Grané, que hace un mes volvió a su antigua casa tras haber culminado la fusión entre Astroc, Rayet Promoción y Landscape, que dio lugar a la actual Afirma. Segundo, han comenzado a unificar todos sus activos inmobiliarios en una misma división y están empezando a diseñar la estrategia de gestión que llevarán a cabo con todas las viviendas que, previsiblemente, van a tener que ejecutar. "Ahora que Grané está disponible, lo que queremos es unificar todo lo que es técnica de gestión inmobiliaria en una dirección y concentrar todos los equipos en esa dirección para poner orden y criterio. Hay mucho dinero para ahorrar ahí, en los inmuebles propios, y mucha eficiencia por conseguir", explican en Sabadell. Aunque la entidad no quiere aventurar la creación de una filial inmobiliaria, y prefiere hablar de una nueva área de negocio, en el sector se da por hecho que este movimiento es el embrión de una nueva Landscape. Bajo este paraguas también se cobijará el fondo inmobiliario de Banco Sabadell, así como los productos estructurados sobre el sector inmobiliario que actualmente ofrece la entidad a sus clientes de banca privada. Otras fuentes han señalado a elEconomista que los próximos pasos de Sabadell se dirigirán en varias direcciones. Por una parte, el banco está muy interesado en adquirir activos patrimoniales, ya que ahora es un buen momento para comprar, y tampoco descarta hacer operaciones con suelo. De hecho, la entidad catalana ya ha empezado a explorar oportunidades de compras, sobre todo, con activos en régimen de alquiler. Pero donde la nueva filial del Sabadell puede dar un salto cualitativo y cuantitativo es con los embargos de inmuebles, donde la entidad, a buen seguro, podría hacer una gran cartera en los próximos meses.