El ministro árabe critica la lentitud y deficiencia en la construcción de los talleresEl ministro de Transporte de Arabia Saudí, Abdullah Al-Muqbel, ha resucitado los fantasmas que cuestionan la continuidad del consorcio español Al-Shoula en la construcción del tren de alta velocidad (AVE) que unirá Medina y La Meca. Hace cuatro meses, el también presidente de la Organización Saudí de Ferrocarriles (SRO, por sus siglas en inglés) amenazó por escrito al consorcio, integrado por Renfe, Adif, Talgo, Indra, Cobra (grupo ACS), OHL, Copasa, Dimetronic, Inabensa, Imathia, Consulstrans e Ineco, con cancelar el proyecto, con un presupuesto de 6.700 millones de euros, y emprender acciones judiciales si no aceleraba el ritmo. El conflicto trascendió hasta las autoridades españolas, con la intermediación de la ministra de Fomento, Ana Pastor, e incluso del Rey Juan Carlos. Su intervención, junto con el nombramiento como consejero delegado del consorcio, Santiago Ruiz, antiguo directivo de FCC con buena sintonía con el Gobierno árabe, apagó las tensiones. Plan alternativo La calma aparente de las últimas semanas, sin embargo, se ha roto ahora después de que el jueves pasado Al-Muqbel visitara las obras del taller central en la ciudad de Medina. El ministro, que es ingeniero, expresó su descontento con el estado de esta parte del proyecto y lanzó una severa reprimenda a la subcontrata, española, a la que el consorcio encargó estos trabajos. Según informa Saudi Gazette, el dirigente árabe criticó que la producción de la compañía es "deficiente" y la ejecución de las obras es "lenta". Por ello, Al-Muqbel ha exigido al consorcio que entregue a la SRO un plan alternativo para restituir el retraso acumulado en la construcción del taller, que de acuerdo con el calendario del ministro ya debería estar culminado. El Gobierno saudí estudiará ahora la propuesta, pero por si no le convence, ha pedido también al consorcio que analice una vía adicional para contratar a otros contratistas que puedan ejecutar el proyecto de inmediato. El ministro, que reclamó a Al-Shoula que dispongan de los trabajadores suficientes para cumplir con los plazos marcados, reconoció, sin embargo, los avances logrados en otros puntos del proyecto, como la estación de tren de Medina, señalan fuentes conocedoras de la visita de Al-Muqbel. Eso sí, incidió en que aún han de ser instaladas las pantallas electrónicas que proporcionarán la información a los viajeros y pidió que se acelere la conexión con la estación King Abdullah Economic City (KAEC) en la localidad de Rabigh. En las pasadas Navidades, cuando se encendió el conflicto entre las autoridades saudíes y el consorcio español, éste defendió que los retrasos acumulados se debían a la reconstrucción de algunos tramos del recorrido que tuvieron que afrontar por errores en la Fase 1 del proyecto, achacables al consorcio chino-árabe que está entregando a las constructoras OHL y Copasa la infraestructura.