Pide el acceso al 75% de los canales 'premium' de su rival frente al 50% propuestoOrange España no se resigna a guardar silencio ante lo que barrunta que se le viene encima. Las propuestas provisionales que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) baraja para aprobar la compra de Canal+ (DTS) por parte de Telefónica amenazan el presente y el futuro del sector, motivos más que suficientes como para arremeter contra el regulador. En opinión de Julio Gómez, director de Regulación de Orange España, las condiciones iniciales "no sólo afectarían al sector televisivo sino que tendría un impacto negativo sobre la competencia en los servicios de telecomunicaciones". En un encuentro con la prensa, el directivo de Orange señaló ayer que la situación que se ha diseñado en la CNMC "dejaría a los operadores alternativos en unas condiciones que no permiten competir con Telefónica". Precios diferenciados A grandes rasgos, Orange rechaza que la "superdominancia de Telefónica en la televisión de pago -con una cuota del 85 por ciento en ingresos y del 70 por ciento en clientes- contamine el resto de los mercados de las telecomunicaciones. Queremos que Telefónica ofrezca sus contenidos de televisión de forma diferenciada y con un precio independiente del resto de los servicios", añade. Según Orange, la limitación de acceso a la oferta mayorista de canales más demandados preestablece un máximo del 50 por ciento del total de dichos contenidos empaquetados. Frente a ese porcentaje, Orange demanda una reventa sobre el 100 por cien de los canales considerados premium, si bien podría admitir el 75 por ciento en línea con otros operadores alternativos. "El 75% podría parecernos algo más razonable", indican. Samuel Muñoz, director del Área Residencial de Orange España, recordó que "Telefónica empaqueta la televisión con todo lo que vende, por lo que claramente el riesgo contra la competencia resulta muy alto", añadió. Entre otras medidas, Orange considera imprescindible "imponer un test que garantice la replicabilidad efectiva y real de las ofertas de Telefónica". Esa situación no existe en la actualidad, ya que, según Orange, "el esquema que en su día impuso Canal+ -en concertación con Telefónica- arroja un coste por abonado de fútbol para Orange que duplica al de Telefónica". De hecho, el esquema que se propone para pagar el fútbol hace que los operadores no abonen un precio proporcional en función del número de clientes o cuota de suscriptores. Sin embargo, la CNMC contempla criterios en los que se pondera la cuota de mercado en ADSL, algo que Orange juzga inadmisible. Asimismo, Orange también rechaza los plazos que prevén fijar a Telefónica para adquirir un contenido en exclusividad por más de tres años, un periodo que Orange juzga "larguísimo, por lo que se debería acortar. Por todo lo anterior, creemos que esas condiciones limitan mucho la capacidad de competir frente a Telefónica". Las reclamaciones de Orange también podrían hacerlas otros operadores, especialmente Vodafone. Esta compañía presentó el pasado miércoles su primera oferta convergente con Ono y en ese acto deslizó su rechazo a la propuesta de la CNMC ya que en los términos actuales pondría en riesgo la competencia en el sector.