Espera lograr pequeños superávits con los que reducir los 26.000 millones del déficit tarifarioA mayor consumo la tarifa subirá menos en los próximos años por el mayor peso de los peajes El Ministerio de Industria ha presentado ya ante la Comisión Nacional de Mercados y Competencia la planificación energética hasta 2020 que prevé un crecimiento medio del consumo de electricidad del 0,7 por ciento. Según los cálculos del departamento que dirige José Manuel Soria, durante los próximos años -si se mantiene la actual política energética- se podrá congelar la parte regulada del recibo de la luz, que representa cerca del 60 por ciento de los costes, lo que puede acabar repercutiendo en una bajada del recibo al ir utilizando los pequeños superavits que se vayan registrando para reducir los costes acumulados por el déficit tarifario durante los últimos trece años. Para poder hacerlo, el Ejecutivo cuenta a su favor con las previsiones de ingresos de los próximos años y con la evolución de la demanda. Según el ministerio de Industria, la mejora de los ingresos puede permitir una rebaja de los costes regulados, ya que actualmente se incluye una partida anual de alrededor de 2.000 millones para amortizar durante los próximos catorce años esta deuda tarifaria. Superávit en 2014 El Ministerio de Industria lanzó además ayer una previsión positiva al considerar que se registrará un superávit de cerca de 100 millones en la última liquidación de 2014 que está todavía pendiente de revisión por parte de la CNMC gracias a la entrada del dinero por el canon hidráulico -recientemente aprobado tras casi dos años de tramitación-, a las devoluciones de las renovables y a la extrapeninsulares. El ministerio considera que con la recuperación económica se incrementará el consumo de energía pero gracias al nuevo sistema de tarifas, en el que la parte regulada tiene un mayor peso, los incrementos del recibo serán menores y los costes energéticos podrán contribuir a la recuperación. El Gobierno reconoce que existe cierta incertidumbre al respecto ya que los usuarios domésticos están reduciendo su demanda, al igual que los pequeños negocios y optimizando la potencia contratada. El Gobierno además está preparando una revisión de los llamados valores unitarios del transporte y la distribución. Según Industria, la CNMC mandó una propuesta al regulador de contenido muy técnico y complicada que está retrasando su aprobación. Fuentes consultadas por este diario, indican que se están revisando los inventarios de instalaciones para poder definir de un modo más concreto las redes que hay instaladas y sus costes. Industria además está a punto de dar la aprobación definitiva para el llamado PVPC horario, es decir, la nueva tarifa por horas que se podrá utilizar gracias a los nuevos contadores digitales. Tarifa horaria La normativa, para la que se dará un plazo de adaptación a las eléctricas de entre tres y cuatro meses, permitirá que los usuarios que tengan perfiles de consumo distintos (por ejemplo aquellos que realizan una mayor parte del consumo por la noche) puedan llegar a beneficiarse en los precios a pagar. Según el Gobierno, este cambio apenas tendrá repercusión en los clientes domésticos ya que su consumo se adapta de una manera más sencilla a los perfiles que tiene ya diseñados y en funcionamiento REE. Industria, no obstante, deja claro que estos cambios no afectarán a todos aquellos que están en el mercado liberalizado y además se prevé que los clientes domésticos pueden decidir hasta 2018 si se les aplica el uso de los contadores horarios. El ministerio además ironizó sobre la amenaza del caos que hicieron las eléctricas cuando se implantó el PVPC y recordaron que no pasó nada y sobre el plan energético del líder socialista, Pedro Sánchez, del que aseguraron que haría subir la luz entre un 40 y un 50 por ciento.